El Centro Nacional de Seguridad Cibernética del Reino Unido (NCSC) confirmó este martes que los servicios de inteligencia militar rusos estaban planeando un ciberataque contra los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de Tokio 2020.

Según la información proporcionada por la NCSC, el objetivo del ataque era:

Instalar software diseñado para borrar datos e inutilizar ordenadores y redes de comunicaciones"

A finales del 2019, la Agencia Mundial Antidopaje apartó a Rusia de las principales competiciones deportivas internacionales durante cuatro años por ser cómplice de una red de dopaje. Esta decisión supone que Rusia no podía, ni podrá competir en los Juegos Olímpicos de Tokio.

El castigo de la Agencia Mundial Antidopaje se debe a datos recopilados por el informe McLaren 2016, el cual descubrió una red de dopaje deportivo patrocinada por el estado.

Los resultados condujeron a diversas sanciones, incluido el hecho de que ningún equipo ruso estuviera presente en los Juegos Olímpicos de Invierno 2018 en Pyeongchang, con ciertos atletas obligados a competir bajo una bandera neutral.

Dominic Raab, ministro de Relaciones Exteriores de Gran Bretaña, comentó el hallazgo de la NCSC:

Las acciones del Departamento Central de Inteligencia de Rusia contra los Juegos Olímpicos y Paralímpicos son cínicas e imprudentes. Las condenamos en los términos más enérgicos"

El Reino Unido afirma que los ciberataques son parte de un patrón del estado ruso para apuntar electrónicamente a países como Ucrania, Estados Unidos, Georgia e Inglaterra.

Los funcionarios británicos destacaron que Rusia se había adherido a una tregua olímpica, la cual incluye el compromiso de no interferir en la seguridad de las máximas justas deportivas.

Tokio 2020 ve la seguridad cibernética como un aspecto importante de la organización de los Juegos, y el comité organizador de Tokio 2020 ha estado tomando una serie de medidas y preparándose a fondo"

Los intentos de ciberataques rusos no son nuevos. En 2018, por ejemplo, ya existió la intención de interrumpir los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de invierno en Pyeongchang (Corea del Sur). En aquella ocasión, el Departamento Central de Inteligencia de Rusia (GRU) buscó atacar a cadenas de televisión coreanas y las instalaciones de una pista de esquí.

Diversos funcionarios de GRU se disfrazaron de piratas informáticos norcoreanos y chinos al apuntar a la ceremonia de apertura de Pyeongchang 2018, en la que bloquearon el sitio web para interrumpir la venta de boletos.