El Plenario de la Asamblea Legislativa no alcanzó este lunes los 38 votos que se necesitaban para la no reelección del magistrado Fernando Cruz Castro.

La Constitución Política costarricense señala que los magistrados tienen como beneficio un régimen de reelección indefinida, revisable cada ocho años, en el cual los diputados pueden bloquear un nuevo periodo si reúnen al menos 38 votos en ese sentido. El resultado de la polémica votación fue de 27 a favor de la reelección, 29 en contra y 2 votos en blanco. 

El proceso estuvo plagado de irregularidades. Solo el diputado Pedro Muñoz Fonseca del PUSC justificó su voto en contra de la continuidad de Cruz; ningún otro diputado hizo uso de la palabra, a pesar que la Comisión de Nombramientos recomendó por unanimidad que el alto juez continuara en su puesto.

Luego, cuando el presidente legislativo, Eduardo Cruickshank ordenó iniciar el proceso de votación y la repartición de boletas para que el voto fuera secreto, los diputados Gustavo Viales y Franggi Nicolás del Partido Liberación Nacional (PLN), junto al independiente Erick Rodríguez Steller, entraron al Plenario ilegalmente por una puerta de emergencia que da al Sótano del Congreso.

Ante el señalamiento de múltiples diputados de que tal ingreso fue espurio, Cruickshank ordenó anular la votación, que los congresistas devolvieran las papeletas e iniciar el proceso de cero, sin embargo, un diputado o diputada no acató la orden y se dejó una de las boletas, obligando a que las nuevas tuvieran que ser selladas para evitar una alteración del resultado.

Cruickhank cuestionó fuertemente a esos tres diputados al afirmar que el reporte de Seguridad desmentía su alegato de que la puerta estaba abierta, y que a pesar de que no tenía la facultad reglamentaria para ordenarles que salieran del Plenario, esperaba que lo mínimo que hicieran era pedir perdón al resto de congresistas y al pueblo costarricense.

Solo la diputada Franggi Nicolás tomó la decisión de abandonar el Plenario en la nueva votación. Viales y Rodríguez se mantuvieron en su curul y participaron de la votación.

Los hechos irregulares ocurridos no tendrán ninguna sanción, debido a que el Congreso se niega a promulgar su propio régimen disciplinario. Además, el presidente legislativo tampoco tiene potestad reglamentaria para sacar del Plenario a un congresista.

Fernando Cruz será juramentado para su nuevo periodo mañana martes 6 de octubre de 2020.