Por Yarot Solís y Ande Romero – Estudiantes del Falcon Fury Marching Band
La limpieza de los instrumentos musicales es un tema que le compete a todos aquellos que han adquirido un instrumento musical, independientemente de la familia de instrumentos a la que este pertenezca. Un buen cuidado del activo musical se puede interpretar como mayor durabilidad del conjunto de piezas que conforman al instrumento musical y, por ende, la totalidad de este. Se puede deducir, entonces, que aquella persona que posee un instrumento musical y le brinda sus respectivos cuidados de limpieza está interesada en el rendimiento, en el sonido, en conservar en buen estado su instrumento musical. Vidal (2018) añade que para los profesionales en dar seguimiento y cuido a los instrumentos musicales, es decir, para los luthiers:
No hay mayor satisfacción que ver un instrumento a cargo de un músico que realmente lo valora y respeta como se merece, que lo entiende como algo más que un medio material para expresar su creatividad musical y profesional, que es capaz de compartir con nosotros la percepción de que los instrumentos son un patrimonio cultural.
Asimismo, Vidal (2018) añade distintas consecuencias sobre el descuido y poca importancia de la limpieza de los distintos instrumentos:
Entre ellas destaca la pérdida de sonido debido a la acumulación de resinas y suciedad, ya que se limita la vibración del propio instrumento. Una mala o nula limpieza del instrumento no permite apreciar correctamente el barniz, fiel indicador del buen o mal estado del instrumento. Así mismo, un instrumento sucio o mal conservado podría restarle valor en caso de querer venderlo o dar una mala imagen del músico.
A continuación, se hablará sobre los métodos de higiene y limpieza que se debe tener como instrumentistas en cada familia de instrumentos:
Viento Maderas
Cuidados Diarios
● Cada vez que se vaya a tocar, limpie antes y después el exterior del instrumento para quitar los excesos de sudor, huellas digitales, grasa, polvo, etc.
● Recuerde que el paño de limpieza debe estar limpio y en buen estado. Se recomienda tener varios y estarlos lavando constantemente.
● Para los sitios donde no se pueda llegar, utilice el limpiador de agujeros o un pincel de cerdas suaves y largas.
Antes de tocar
● Limpie con un paño o gasa los empates antes de ensamblar las partes.
● En los piccolos, oboes, clarinetes y fagotes, aplique grasa para corchos en los corchos del empate.
● La grasa de corchos es posible encontrarla en dos presentaciones: suave para climas fríos y templados, y dura para climas cálidos.
● Recuerde limpiar los restos de grasa de sus manos con un paño o servilleta desechable.
● Si se usan ungüentos o cremas que contienen azufre (para el tratamiento del acné), estos pueden causar decoloración si entran en contacto con el plateado del instrumento, con lo cual éste puede tomar coloración negra o marrón. Para prevenir esto, asegúrese de tener la manos y la cara limpias antes de tocar.
Después de tocar
● Desensamble con cuidado el instrumento ubicando las partes en un sitio seguro.
● Seque el interior de cada una de las partes del instrumento utilizando un paño o gasa absorbente junto con la varilla de limpieza.
● En la flauta, cubra muy bien la varilla de limpieza, ya que las partes metálicas expuestas pueden rayar el interior del instrumento.
● Seque muy bien los empates, pues los restos de humedad acortan la vida de las zapatillas y la madera se agrieta cuando no se lubrica y puede causar resequedad fácilmente.
● Seque muy bien las zapatillas utilizando papel para zapatillas o papel absorbente. Con la llave abierta, inserte una hoja de papel para zapatillas, golpee suavemente la llave de tal manera que cualquier resto de humedad en la zapatilla sea empujado hacia el papel.
● Si aún después de la operación anterior se siente la zapatilla pegajosa al accionar la llave, aplique papel para zapatillas con polvo de manera similar, pues esta sustancia termina por neutralizar la adherencia.
Mantenimiento Ocasional
● Lubrique las llaves dependiendo del tipo de instrumento: para flautas se usa un aceite liviano, para los clarinetes un aceite medio, y para los saxofones un aceite grueso aplicando gotas pequeñas en las juntas entre las torres y los ejes. Accione repetidamente la llave y limpie los excesos de aceite.
Vientos Metales
Cuidados diarios
● Con un paño suave limpie el exterior del instrumento de sudor, huellas digitales, grasa, polvo, etc. No aplique presión innecesaria a los pistones o llaves durante este procedimiento.
● Recuerde que el paño de limpieza debe estar limpio y en buen estado. Se recomienda tener varios y estarlos lavando constantemente.
● Para los sitios donde no se pueda llegar, utilizar el limpiador de agujeros o un pincel de cerdas suaves y largas.
Antes de tocar
● Lubrique los pistones extrayéndolos en orden de numeración hasta un tercio de su longitud aproximadamente. Sin girarlos y en línea recta, aplique 4 o 5 gotas de aceite de válvulas sobre la superficie del pistón. Inserte el pistón y acciónelo en línea recta para que el aceite se logre esparcir de manera uniforme.
● Tenga en cuenta que los pistones son las partes más importantes del instrumento. Debe manipularlos con delicadeza y no permitir que se golpeen.
● Lubrique las bombas extrayéndose completamente y agregando grasa de manera uniforme. Una vez hecho esto con ambos tubos, inserte la bomba de manera normal.
Después de tocar
● Incline el instrumento y abra todas las llaves de desagüe en las bombas y curvas.
● Extraiga la bomba de afinación principal y séquela pasando un paño absorbente con pesa del tamaño apropiado a través de ella. Realice esta misma operación con las demás bombas de afinación y la boquilla.
