Mediante una carta pública, el presidente del Comité Olímpico Internacional (COI), Thomas Bach, indicó que los Juegos Olímpicos de Tokio 2021 no requerirán de una vacuna contra la COVID-19 para convertirse en una realidad.

También vemos que el deporte se puede organizar de forma segura, incluso bajo las restricciones vigentes. Esto debería darnos a todos confianza en nuestros preparativos para eventos futuros, incluidos los Juegos Olímpicos de Tokio 2020."

Esta nueva carta de Bach cambia drásticamente el panorama, ya que en abril la Asociación Médica de Japón afirmó que era necesaria una vacuna contra la COVID-19 para que las máximas justas se llevaran a cabo en el país nipón.

La Asociación Médica de Japón es la mayor asociación profesional de médicos con licencia en Japón. La JMA ha sido miembro de la Asociación Médica Mundial desde 1951 y tiene gran injerencia en las decisiones globales.

Tomas Bach también aseguró en ese mes que estaba completamente descartado realizar un segundo aplazamiento de Tokio 2020.

Bach le comentó al diario alemán Die Welt:

No sería posible (un aplazamiento a 2022). Me dejaron muy claro que Japón no podría asumir un aplazamiento más allá del próximo verano".

El Comité Olímpico Internacional (COI) estimó que se perdieron 800 millones de dólares a raíz de aplazamiento de este año. La cifra incluyó los sacrificios económicos realizados por organizaciones, federaciones y comités olímpicos nacionales.

Estos US$ 800 millones consisten en dos partes principales. Hay una parte de US$ 650 millones que se refiere al costo para la organización de los Juegos Olímpicos pospuestos para el COI y un paquete de ayuda de hasta US$ 150 millones para el movimiento olímpico, en particular las federaciones internacionales y los comités olímpicos nacionales".

Japón se enfrenta actualmente a una lucha de intereses, ya que el público también está escéptico ante la realización de los Juegos Olímpicos. Según una encuesta desarrollada por el medio Japan News Network, el 77% de los japoneses creen que los Juegos Olímpicos no se celebrarán en 2021 y por ende, deberían ser cancelados.

En la nueva carta Bach también se refirió a las puertas que abren: "las llamadas pruebas rápidas, que ya están en el mercado o en desarrollo. Cuando se utilizan en combinación con otras medidas contra el virus, nos proporcionan una importante herramienta adicional para garantizar un entorno seguro para todos los participantes".

El país del sol naciente ha reportado 1.508 muertes por COVID-19, sin embargo, los nuevos casos en Tokio han disminuido considerablemente en el ultimo mes. El desafío de los organizadores ahora será dar la bienvenida a atletas de 206 países, donde las condiciones sanitarias son muy distantes a las que tiene actualmente el pueblo nipón. 

Actualmente Costa Rica tiene cinco plazas aseguradas para Tokio 2021. Andrea Vargas (atletismo), Brisa Hennessy (surf), Kenneth Tencio (BMX Freestyle), un ciclista de ruta masculino y una ciclista de ruta femenino, serán los representantes nacionales en la máximas justas del orbe.

Con respecto a los cupos de ciclismo de ruta, la Federación Costarricense de Ciclismo (FECOCI) será la encargada de decidir entre Andrey Amador o Kevin Rivera, y María José Vargas o Milagro Mena.

La carta completa de Bach

Desde el primer mensaje “Olimpismo y Corona” en abril, nuestro mensaje sobre los impactos positivos en la salud, sociales y económicos del deporte en la sociedad en general ha ganado un impulso considerable. Lo que podemos ver ahora es que el deporte está ampliamente reconocido como un factor esencial en la lucha contra la pandemia, que aún persiste en muchos países. El deporte también se acepta como parte integral de la solución para la recuperación de la crisis, que está en marcha en otros países.

Afortunadamente, también estamos viendo eventos deportivos en vivo nuevamente. La acogida muy positiva de estos eventos demuestra claramente que no solo los atletas y las organizaciones deportivas, sino también el público en general han estado añorando el regreso del deporte como parte integral de nuestras vidas. También vemos que el deporte se puede organizar de forma segura, incluso bajo las restricciones vigentes. Esto debería darnos a todos confianza en nuestros preparativos para eventos futuros, incluidos los Juegos Olímpicos de Tokio 2020. Me gustaría agradecer a todas las personas que nos han llevado hasta aquí trabajando incansablemente para mantener en marcha nuestras sociedades, y a todos ustedes en el comunidad deportiva que trabaja con gran responsabilidad y creatividad en la organización de eventos deportivos, salvaguardando la salud de todos los interesados.

Sobre la base de este éxito inicial, esperamos que llegue el momento en que se puedan aliviar las numerosas restricciones, que ahora son esenciales. Pero tenemos que seguir actuando de forma responsable cuando se trata de planificar y programar nuestros eventos deportivos. El virus aún no está derrotado. Debemos seguir contribuyendo a su contención y ser parte de la solución para la recuperación de la crisis.

En nuestra planificación y programación, todos tenemos una gran responsabilidad, no solo para nuestros respectivos interesados, sino para toda la comunidad deportiva. Por experiencia, sabemos que cada percance que nos afecta a uno de nosotros nos afecta a todos y tiene el potencial de deshacer el gran progreso que hemos logrado juntos en los últimos meses.

En este contexto, estamos monitoreando el potencial de métodos de prueba innovadores para la organización segura de eventos. Además de los métodos de prueba ya existentes, hay una serie de las llamadas pruebas rápidas que ya están en el mercado o en desarrollo. Cuando se usa en combinación con otras contramedidas de virus, estas pruebas rápidas nos brindan una herramienta adicional importante para garantizar un entorno seguro para todos los involucrados.

Además de estas buenas noticias con respecto a las pruebas, hay señales muy alentadoras de la comunidad científica y médica sobre la disponibilidad de vacunas aprobadas en los próximos meses, tal vez incluso antes de finales de este año.

En conjunto, los avances en las pruebas y en las vacunas facilitarán en gran medida la organización segura de eventos deportivos. Todos deberíamos tener en cuenta el momento de la disponibilidad de estas nuevas herramientas cuando se trata de la programación de nuestros eventos. Por lo tanto, a los muchos escenarios diferentes que está planeando el COI, hemos agregado uno para aprovechar al máximo el potencial de las pruebas y las vacunas.

Por un lado, estas últimas semanas han demostrado que podemos organizar grandes eventos deportivos de forma segura incluso sin vacuna. Por otro lado, tenemos que darnos cuenta de que incluso los métodos de prueba y las vacunas no son la "solución milagrosa" que resolverá todos nuestros problemas. Simplemente, aún no conocemos el impacto total de cualquier vacuna potencial. Pero, en conjunto, hay buenas razones para un optimismo cauteloso.

El COI seguirá estudiando de cerca estos desarrollos. También estamos evaluando qué consecuencias tendrían para la organización de eventos deportivos, que van desde la necesidad de cambiar ciertas reglas de nuestras respectivas organizaciones hasta aspectos médicos, económicos, sociales y logísticos. Con este fin, continuamos cooperando estrechamente con la Organización Mundial de la Salud, las autoridades públicas, los expertos médicos y científicos, así como las empresas farmacéuticas. También nos basamos en la experiencia de aquellas organizaciones deportivas que recientemente han organizado eventos exitosos. Por supuesto, compartiremos cualquier idea con todos los interesados ​​entre ustedes, para que todos los que formamos parte del Movimiento Olímpico podamos beneficiarnos.

Hemos demostrado en los últimos meses que somos #StrongerTogether. Con este espíritu de solidaridad, debemos seguir contribuyendo a la contención del virus y a la recuperación de la crisis. De antemano, ya me gustaría agradecerles mucho por su continua cooperación en nuestro esfuerzo compartido de dar esperanza y confianza al mundo a través del deporte.