El Ministerio de Seguridad Pública informó el día de hoy que puso en posesión una de las fincas del territorio indígena Salitre, ubicada en el cantón de Buenos Aíres, en la provincia de Puntarenas. La orden fue emitida por el Departamento de Desalojos Administrativos de ese Ministerio.

Según informaron las autoridades, la Fuerza Pública ingresó hoy en horas de la mañana a la propiedad para proceder con el desalojo, pero no se encontraron a las personas demandadas dentro del terreno que, al parecer, ya se habían marchado, por lo que el desalojo y su posesión transcurrieron de manera pacífica.

La finca se puso en posesión de la Asociación de Desarrollo Integral del Territorio Indígena de Salitre, quienes ahora tendrán la administración del inmueble.

El viceministro de Seguridad Pública, Eduardo Solano Solano, aseguró que “de esta manera vamos ejecutando el saneamiento territorial y el compromiso del Gobierno de la República, en cumplir con la reivindicación de los derechos indígenas y la devolución de sus territorios dentro del marco de la legalidad y la institucionalidad”.

Solano recordó que se han presentado ocho expedientes de desalojo ante el Ministerio y con este solo permanecen tres pendientes, debido a medidas cautelares que impiden la ejecución de esos desalojos.

La Ley Indígena 6172 del año 1977, en su artículo 3, establece que las tierras de estos territorios "son inalienables e imprescriptibles, no transferibles y exclusivas para las comunidades indígenas que las habitan" y que "los no indígenas no podrán alquilar, arrendar, comprar o de cualquier otra manera adquirir terrenos o fincas comprendidas dentro de estas reservas".

Sin embargo, durante años dichas tierras han sido ocupadas por personas no indígenas que se hicieron de las terrenos de diversas formas, ya sea poseyéndolas a la fuerza o comprándolas a pesar de que esto sea ilegal. Esto ha generado, principalmente después de que los pueblos indígenas decidiesen unirse para recuperar sus territorios (en el proceso que llaman "recuperación de tierras") una escalada en la violencia en la zona.