Tal como indicó un comunicado emitido por la Unión de Clubes de Fútbol de la Primera División (UNAFUT), el Ministerio de Salud rechazó un nuevo protocolo sanitario que pretendía asegurar la continuidad de la Liga de Ascenso, Liga Promerica masculina y Liga Promerica femenina cuando exista algún caso de COVID-19.

A partir de esta premisa, los dirigentes del fútbol nacional solicitaron "una reunión urgente" con el ministro de Salud, Daniel Salas, y el presidente Carlos Alvarado para analizar el rechazo.

Hace 22 días se envió al Ministerio de Salud, un documento que contiene la propuesta de ampliación del protocolo sanitario, con la idea de garantizar el cumplimiento efectivo de nuestras competiciones."

El planteamiento rechazado consistía en que, ante la aparición de un jugador positivo por COVID-19, se suspendía de inmediato los entrenamientos y partidos. Posterior a este hecho, se procedía a realizar pruebas de laboratorio (PCR) a todo el plantel de jugadores e integrantes del cuerpo técnico, tal como sucede actualmente.

La diferencia radicaba en que si los integrantes del club daban negativo en la prueba COVID-19, se les brindaba la posibilidad de reincorporarse a los entrenamientos y partidos inmediatamente, con el compromiso de repetir la prueba en cinco días. Dado el caso que vuelva a salir negativa, el jugador o jugadora continuará su actividad normal.

Este protocolo sanitario emula lo realizado en Europa, la Liga MX de México y la MLS de Estados Unidos.

El planteamiento fue elaborado por la Comisión Médica de UNAFUT y fue respaldado por médicos especialistas en Infectología y en Epidemiología, de modo que consiste en una propuesta seria, fundamentada en la experiencia de otros países, con lo cual nos aseguramos de que la propuesta no iba a implicar un aumento en el riesgo que ya tenemos de ser contagiados del coronavirus SARS COV2."

Actualmente los(as) futbolistas que pertenezcan a un club con casos COVID-19 o tengan contacto con un paciente confirmado deben mantenerse sin salir de sus hogares por un periodo de dos semanas, pese a que la prueba COVID-19 revele que no tienen el virus, como pasó en Saprissa y Cartaginés en la primera división masculina.

Según la UNAFUT, la petición estaba condicionada a que cada jugador e integrante del cuerpo técnico firme una declaración de compromiso de mantenerse dentro de círculo familiar con la finalidad de reducir el riesgo de contagio.

Sumidos en esta dinámica, la Federación Costarricense de Fútbol (Fedefútbol) y la UNAFUT también consiguieron reducir el costo de las pruebas, mediante un contrato de patrocinio con Laboratorios Labin.

Los dirigentes cerraron el comunicado disgustados con la labor del Ministerio de Salud y el Ministerio del Deporte, ya que la semana anterior aparentemente les dijeron que el protocolo solo requería algunos cambios, por lo que ellos entendieron que existía cierta aceptación. El documento con los supuestos cambios requeridos nunca llegó.