En el marco del Día Mundial de la Prevención del Embarazo en la Adolescencia (26 de setiembre), es importante recordar que la maternidad en la adolescencia, en la mayoría de los casos, puede conllevar consecuencias negativas e irreversibles.

Según la Oficina Regional del Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA), la región de América Latina y el Caribe se sitúa el segundo lugar en maternidad adolescente. Se registran 62 nacimientos por cada 1,000 niñas adolescentes entre 15 y 19 años. Por lo general estas niñas y adolescentes viven en situación de pobreza y con un limitado acceso a servicios sociales básicos.

Para muchos la situación es preocupante, no solo por las consecuencias inmediatas que esto trae para las niñas y adolescentes, sino por la pérdida de sus oportunidades de desarrollo, así como por los altos costos económicos que tiene el embarazo temprano para el Estado y la sociedad", declaró el Director de UNFPA, Harold Robinson.

En el comunicado de UNFPA se indica que el costo de cada embarazo adolescente en América Latina y el Caribe alcanzó, en 2018 en promedio, el equivalente a 1.210 dólares anuales. 

Datos en Costa Rica

Para el 2019, se dieron 5 nacimientos a la semana en niñas de 14 años o menos. Esto representó 264 nacimientos en esa población (0,4% del total de nacimientos) el año anterior. No obstante, la cifra se ha reducido: en el 2000 se daban 12 nacimientos en niñas de 14 años o menos cada semana, un total de 611 al año.

Un dato que alarma es que el 29% de niñas madres de 14 años o menos tenían la primaria incompleta o no habían asistido a educación formal en el 2019. De ellas, el 30% se dedica a los oficios domésticos y no a estudiar.

Reconocemos los esfuerzos que han hecho los países en la formulación de planes nacionales de salud reproductiva y desarrollo en América Latina y el Caribe; sin embargo, es muy importante monitorearlos y evaluarlos, en base a la evidencia disponible. Esto nos permitirá revaluar las intervenciones que no funcionan, incluidas las campañas, y reforzar aquellas que han arrojado resultados positivos para llegar, de un modo eficaz, a los adolescentes que viven en condiciones de vulnerabilidad, especialmente aquellos pertenecientes a comunidades más pobres, indígenas, afrodescendientes y migrantes", enfatizó Harold Robinson.

Adicionalmente, se reportó un 4,9% de nacimientos de niñas de 14 o menos en el marco de relaciones impropias. Pero, el principal detalle reside en que en el 86,7% de los nacimientos no se registró la edad padre o bien no se declaró al padre. Lo anterior podría ocultar las relaciones abusivas y de poder que viven las niñas y adolescentes con hombres adultos. 

Para el año 2019, se dieron 8041 nacimientos en niñas y adolescentes de 19 años o menos. En 1420 de los casos, las niñas o adolescentes reportaron que ya tenían otro hijo o hija (17,7%). En este apartado los focos y la lupa se dirigen a los cantones que se reportaron en mayor medida: 

  • Un 37,5% en Hojancha (Guanacaste).
  • Un 36,4% en Flores (Heredia).
  • Un 30,2% en Bagaces (Guanacaste).
  • Un 28,4% en Coto Brus (Puntarenas).
  • Un 26,1% en Guatuso (Alajuela).
  • Un 25% en Talamanca (Limón), Atenas (Alajuela) y Belén (Heredia).


*Datos desprendidos del Sistema de información estadística sobre nacimientos en niñas y adolescentes en Costa Rica. UNFPA, INEC. https://costarica.unfpa.org/es/nacimientos / https://bit.ly/33gOCrE