El ex deportista y actual entrenador de patinaje artístico, Craig Maurizi, presentó una demanda formal contra el reconocido técnico Richard Callaghan y tres organizaciones de patinaje artístico que presuntamente encubrieron su conducta.

Richard Callaghan (derecha) da indicaciones a dos alumnos. 

En agosto del 2019, Richard Callaghan recibió la expulsión permanentemente de cualquier competencia o actividad relacionada con el Comité Olímpico de los Estados Unidos después de ser acusado en una demanda por abusar sexualmente del atleta Adam Schmidt repetidamente entre 1999 y 2001 (cuando Schmidt tenía 14 años).

Esta prohibición de por vida se convirtió en una sanción de 3 años porque Callaghan apeló en diciembre del año anterior.

A la demanda de Adam se suma la nueva acción civil de Craig Maurizi, presentada este lunes en Buffalo, Nueva York. La abogada de Maurizi, Ilene Jaroslaw, comentó a NBC News:

La conducta de Callaghan fue la de un depredador sexual infantil de libros de texto".

Aunado al nombre de Callaghan, la demanda también menciona a Buffalo Skating Club (BSC), Professional Skaters Association (PSA) y la Asociación de Patinaje Artístico de los Estados Unidos (USFS) como co-protagonistas del delito.

Craig Maurizi, ex deportista y actual entrenador de patinaje artístico.

Según la denuncia, Callaghan fue expulsado del Buffalo Skating Club (BSC) en 1980 por el abuso de Craig. El texto dice textualmente:

En lugar de tomar cualquier medidas para detener el abuso de Callaghan, como hacer un informe oficial ante el USFS, a la Professional Skaters Association o la policía, Buffalo Skating Club le impuso otro club de patinaje, el Philadelphia Skating Club (...) Sobre la base de la información y la creencia, se sabía ampliamente entre los miembros de USFS y PSA que Callaghan había sido expulsado de BSC debido a su abuso de Craig y otros".

Aparentemente Callaghan daba alcohol a los jóvenes antes de abusar sexualmente de ellos. El Buffalo Skating Club sabía que el entrenador mantenía el alcohol en su oficina. La demanda dice textualmente:

A medida que aumentaba la actividad sexual, Callaghan comenzó a llevar a Craig a bares".

Craig Maurizi afirmó que un conductor del Buffalo Skating Club entró a la oficina cuando Callaghan estaba abusando sexualmente de un menor e informó de ese incidente a la junta directiva, sin embargo, estos funcionarios nunca tomaron medidas.

El demandante está buscando $10 millones y daños punitivos para "disuadir su conducta intencional y sin sentido". Maurizi es reconocido en el gremio como un férreo crítico de las federaciones deportivas por no hacer nada para frenar los abusos sexuales contra los atletas.