La Federación de Rugby de Nueva Zelanda anunció que la nueva liga de rugby, Investec Super Rugby Aotearoa, arrancará el próximo sábado 13 de junio sin limitaciones de público.
La liga "Investec Super Rugby Aotearoa" viene a reemplazar el "Super Rugby", un torneo que enfrentaba equipos de Nueva Zelanda, Sudáfrica, Argentina, Australia y Japón. El cierre de fronteras, a raíz de la COVID-19, imposibilitó reanudar este tradicional torneo.
El nuevo torneo se diputará entre 5 equipos locales de la isla y no implementará limitaciones en las gradas porque el gobierno neozelandés anunció este lunes que el último caso de COVID-19 ya está curado y a partir de hoy, todos los ciudadanos podrán seguir su vida con normalidad. A través de Twitter, las autoridades neozelandesas indicaron:
Esto significa que ahora hay 0 casos activos en Nueva Zelanda. Gracias por quedarse en casa, evitar riesgos y por apoyar a los que luchan contra el virus".
El rugby es el deporte #1 de Nueva Zelanda y por ende, se espera un aforo completo en el primer partido entre Hurricanes y Blues este sábado. El enfrentamiento tendrá lugar en el Forsyth Barr Stadium de Dundedin, un estadio con capacidad de albergar 30 748 espectadores.
Mediante un comunicado de prensa, Chris Lendrum, jefe de rugby profesional de la NZR, explicó que:
Esta autorización implica que se cambiarán los horarios de los encuentros para facilitar la asistencia de los seguidores, así como que los equipos podrán preparar los encuentros con normalidad y no tener que viajar imperiosamente los días de los partidos."
Esta medida es histórica para el deporte mundial, ya que el rugby se convertirá en la primera disciplina con la capacidad de regresar con público en las gradas y sin limitaciones sanitarias.
Con una población de 5 millones de personas, Nueva Zelanda registró 1.154 casos de COVID-19 y 22 muertes en total. Las autoridades gubernamentales indicaron que la alerta pasa a nivel 1 y aún no abrirán fronteras, como medida de precaución.