El Presidente de la República, Carlos Alvarado y su ministro de Hacienda, Elian Villegas presentaron un proyecto de ley a la Asamblea Legislativa para posponer la entrada en vigencia del Impuesto al Valor Agregado (IVA), a cambio de imponer Impuesto sobre la Renta al salario escolar que reciben los empleados del sector público.

Se trata del expediente 22.029 y cuya asignación de comisión para estudio aún está pendiente por parte del presidente legislativo, Eduardo Cruickshank.

A través de un comunicado de prensa, Hacienda afirmó que la propuesta consiste en pasar a julio de 2021 la entrada en vigencia del 1% del IVA para los bienes incluidos en la Canasta Básica Tributaria, ya que la Ley 9635 Fortalecimiento de las Finanzas Públicas, dispone que debe entrar a regir el 1 de julio de este 2020.

La medida, sin embargo, tendrá un efecto en los ingresos tributarios esperados por el Ministerio de Hacienda por el orden de unos 33 mil millones de colones, por lo que el gobierno propone compensarlo eliminando el inciso de la Ley del Impuesto sobre la Renta que dispone que el salario escolar no está sujeto a ese impuesto.

El ministerio no señaló cuánto espera recaudar cobrando ese tributo. Solo indicó que un estudio del año 2018 encontró que representa cerca del 0,12% del PIB en gasto tributario, unos 40.572 millones de colones.

“Dado el incremento en los gastos como efecto de la pandemia y por el compromiso con la responsabilidad fiscal, es preciso acudir a una fuente de recursos que permita compensar los ingresos que recibiría el gobierno de no darse la moratoria del cobro de IVA en canasta básica. De ahí nuestra propuesta para que a partir del próximo año se grave con renta el salario escolar, en las mismas condiciones en que se encuentran gravados los salarios en todo el sector laboral costarricense. Eso significa que se mantendría un monto exento y a partir de ahí se aplicaría el mismo porcentaje de impuesto escalonado que ya se utiliza para gravar los salarios”, explicó Elian Villegas, ministro de Hacienda.

Si el proyecto fuera acogido por el Congreso, el salario escolar estaría sujeto a la misma escala del Impuesto sobre la Renta que el salario ordinario. Es decir, el salario escolar inferior a 840 mil colones no pagaría el tributo; sobre el exceso de 840 mil y hasta 1.233.000 colones se pagaría 10%; sobre el exceso de 1.233.000 mensuales y hasta 2.163.000 colones se pagaría un 15%; sobre el exceso de 2.163.000 y hasta 4.325.000 mensuales se pagaría un 20% y sobre el exceso de la última cifra se pagaría un 25%.