Marypaz Martínez Calvo obtuvo una beca completa para estudiar en Central Point High School de Florida, Estados Unidos. Este salto al extranjero no es nuevo para las atletas nacionales, ya que actualmente hay 9 ticas jugando en el baloncesto universitario y colegial de Norteamérica (México y Estados Unidos).
Martínez conversó en exclusiva con LaJornada.cr y amplió sobre la importancia de tener referentes en el deporte:
Hace poco, Daniela Quesada pasó al baloncesto universitario y eso me inspiró mucho. Si las otras chicas pueden, nosotras también podemos".
Las 10 basquetbolistas costarricenses que están en el extranjero son:
- Kayla Hall Waston - Salem University - Estados Unidos
- Kattyle Pinnock - West Virginia University - Estados Unidos
- Daniela Quesada - Salem University - Estados Unidos
- Francesca Torres - Tri City Christian High School - Estados Unidos
- Marypaz Martínez - Central Point High School - Estados Unidos
- Mariam Córdoba - Candelet High School - Estados Unidos
- Monserrat Martínez - Tecnológico de Monterrey - México
- Amanda Fernández - Tecnológico de Aguascalientes - México
- Daniela Mora - Tecnológico de Toluca - México
- María José Mora - Tecnológico de Toluca - México
Según el presidente de la Federación Costarricense de Baloncesto (FECOBA), este grupo de mujeres está rompiendo barreras y en 2021, tienen la ilusión de añadir dos jugadoras más a la lista. Frankin Martínez comenta que la FECOBA ha brindado algunos empujones, sin embargo, el mérito de conseguir estas becas yace en la actitud de cada basquetbolista.
Mi sueño es llegar a la selección mayor de Costa Rica y reunirnos todas las que hemos estado entrenando duro afuera. (...) Estoy segura que será un equipazo."
Martínez viene de una familia que respira este deporte. Su hermana mayor, Montserrat Martínez, milita en el Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Monterrey, su hermano menor participa en el baloncesto 3x3 y sus padres se enamoraron jugando en los Juegos Deportivos Nacionales.
Marypaz empezó a jugar a los 4 años porque sus padres daban clases de baloncesto en su escuela. Actualmente tiene 15 años, mide 1.70cm y ya cuenta con experiencia en selecciones nacionales menores (U-14, U-16 y U-18).
Por empezar desde tan chiquita, siempre me paso que no había equipo completo en mi categoría y por eso me ponían a jugar con las grandes."
La protagonista de esta historia confiesa que su hermana mayor siempre fue la potencializadora de su talento. Desde que llegó a la selección menor, Marypaz estaba convencida que debía ir por medallas porque Monserrat siempre lo hacía.
Yo siento que desde que yo entré a proceso de selecciones (2017) el baloncesto femenino ha cambiado demasiado. Sobre todo por la actitud de mis compañeras. Antes solo creían en la hombres y cuando empezamos dar resultados también, todos empezaron a creer."
La oportunidad de firmar con Central Point High School se dio gracias a una clínica organizada por el narrador de ESPN, Carlos Morales, en el Colegio de Abogados en Zapote, San José. Marypaz cuenta que tenía dudas de ir porque estaba en plenas finales nacionales de Juegos Deportivos Nacionales, sin embargo, le hizo caso a su padres y partió hacia el gimnasio.
Recuerdo que empecé los entrenamiento sin tomarlo muy en serio y Carlos Morales Jr. (hijo de Carlos Morales) estaba encima mío pidiéndome dar más. En cierto instante del entrenamiento, se acercó y me dijo que quería llevarme al colegio que él entrenaba en Estados Unidos. Pensé que era un broma y seguí entrenando".
La promesa no era una broma. Cuando concluyó el entrenamiento, Carlos Morales Jr hizo una reunión con todas las jugadoras y enfatizó en darlo todo en cada entrenamiento. Posterior al discurso, el entrenador dijo:
Hoy por ejemplo, Marypaz Martínez vino a un entrenamiento normal y se fue con una beca del 100% para estudiar en Estados Unidos."
Marypaz no lo podía creer. La jugadora habló de inmediato con su madre para coordinar todos los detalles con Morales. En ese instante, el director de la clínica la invitó a un campamento en el estadio del Orlando Magic. El objetivo de la visita, realizada en febrero de este año, era conocer toda la dinámica del baloncesto en Estados Unidos, antes de incorporarse a su equipo colegial.
En Orlando encontré jugadoras más atrevidas que en Costa Rica y América Central. Se atreven más al enfrentamiento 1 vs 1, por lo que será algo que debo mejorar y practicar más".
A raíz de la pandemia, la jugadora costarricense aún no tiene la oportunidad de irse a su nuevo hogar, sin embargo, también cuenta (entre risas) que ya conoce a las compañeras del equipo por la plataforma Zoom. A juzgar por su electricidad, en este instante debe estar contando los minutos para volar y emprender el sueño de ser la primera, o la segunda...o la novena costarricense en la WNBA.