Alexander Solís, presidente de la Comisión Nacional de Emergencias (CNE), anunció este martes que la contención de la propagación de la COVID-19 en la ciudadela La Carpio fue "exitosa".

Según el jerarca de la institución, el domingo anterior el Ministerio de Salud levantó la orden sanitaria de aislamiento a 32 personas que estaban bajo aislamiento en un centro de contención establecido por las autoridades para dar seguimiento a poblaciones que, por su condición de vulnerabilidad o por no tener arraigo y vivir en condiciones sanitarias que no posibilitan cumplir la orden sanitaria de cuarentena, deben ser llevados a uno de estos centros.

De ese grupo de 32 personas, 23 corresponden a residentes de La Carpio que fueron aislados en un centro especial debido a situación de vulnerabilidad. La medida permitió mitigar la aparición de casos en esa localidad.

Otras nueve personas corresponden a transportistas centroamericanos que también estuvieron durante un largo periodo aislados en dicho centro. "De no haber tomado esta medida se habría generado una dispersión mayor del virus", afirmó el presidente de la CNE.

Los transportista ya fueron llevados a Peñas Blancas para que puedan proseguir su viaje hasta sus respectivos países.

El objetivo de la contención es evitar la propagación del virus, evitar que tengamos una transmisión comunitaria y es en lo que hemos venido trabajando como equipo de manejo de situación de la emergencia.

Solís afirmó que las comunidades deben organizarse para hacer contención de personas en vulnerabilidad, pues es muchísimo más seguro tener a las personas en un sitio de contención, que la posibilidad de que las personas diagnosticadas como positivo deambulen en la comunidad.

El presidente de la CNE también enfatizó que quienes que van a un albergue son personas que están con diagnóstico positivo o son sospechosos, y tienen una orden sanitaria, pero sus condiciones de vulnerabilidad no les permite hacer la cuarentena en sus casas.

"No son centros para atender a personas de una nacionalidad en específico, son tanto para costarricenses como para otros que no tengan arraigo en el país, tal es el caso de los transportistas", agregó.

Los centros de contención empezaron a crearse en el mes de mayo. A la fecha hay uno instalado en el BN Arena de Hatillo donde hay 72 personas en condición de calle siendo protegidas y cuenta con una capacidad de 100 personas; un hostal en el centro de San José que alberga a otras 21 personas en condición de riesgo que están siendo protegidas, un hostal en Santa Rosa de Pocosol que actualmente no alberga a ninguna persona, pues fueron trasladados a San Isidro de Peñas Blancas a un salón comunal (19 personas albergadas con una capacidad de 30); y otro hostal en San José que protege a 15 personas y cuenta con una capacidad de 60.