La Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) confirmó la noche de este jueves que un caso de COVID-19 en un funcionario del Hospital Rafael Ángel Calderón Guardia, del cual no se pudo determinar su nexo epidemiológico, devino en una cadena de contagios que ahora abarca a 12 empleados. 

De acuerdo con la institución, el centro médico activó el protocolo de control de infecciones luego de conocer que el 22 de junio un funcionario que realizó un trámite administrativo de una incapacidad prolongada había dado positivo por COVID-19.

Esa persona infectó a otro funcionario y según el doctor Pedro Pereiras Álvarez, subdirector general del hospital, el rastreo dio como resultado 37 funcionarios que eran contactos cercanos, en su mayoría del servicio de Farmacia. Ahora todos están en aislamiento y se procedió a una limpieza y desinfección profunda de la Farmacia Central y las farmacias satélites que tiene este centro médico.

El trabajo de la Unidad de Vigilancia Epidemiológica y el Comité de Infecciones se tradujo en la realización de pruebas de COVID-19 a todos los contactos de ese segundo funcionario, lo cual arrojó 11 casos positivos más y 26 descartados pero que se fueron en aislamiento y esperan la orden sanitaria del Ministerio de Salud.

De acuerdo con el subdirector, el servicio de consulta externa no se ha visto afectado y la investigación de nexo del caso origen determinó que se trató de una infección adquirida en la comunidad, pues no hubo nexo hospitalario.

Por su lado, el doctor Jorge Chaverri Murillo, médico especialista en infectología y coordinador del Comité de Infecciones local, informó que el funcionario incapacitado realizó unas gestiones administrativas el 16 de junio y el 21 de junio. Además consultó en el triage del servicio de emergencias del hospital por presentar síntomas.

"Al siguiente día se conoció el resultado positivo por lo cual se procedió de inmediato a realizar la investigación de contactos el propio lunes. Este mismo día se identificó un funcionario del servicio de Farmacia que presentaba síntomas y con el cual había estado en contacto, después se supo que también estaba positivo por COVID-19", dijo Chaverri.

De acuerdo con la Caja, el servicio de Farmacia es el que tuvo mayor cantidad de funcionarios aislados (32 en total), y los otros cinco son contactos familiares que laboran en los servicios de laboratorio y otro en nutrición.

Debido al hallazgo, todo el personal del servicio de farmacia (141 personas) fue sometido a pruebas de COVID-19.

Así ocurrió la cadena de transmisión.

Más casos de contagio comunitario

Ayer la CCSS informó que un funcionario del Hospital Nacional de Niños resultó infectado con el SARS-CoV-2, causante de la COVID-19, y que otros nueve empleados están ahora en aislamiento por ser contactos cercanos.

Olga Arguedas Arguedas, directora médica, afirmó que se activó el plan de rastreo de contactos, manejo de brote y prevención y control de infecciones luego de recibir la comunicación del resultado positivo.

Según el reporte, el funcionario presentó síntomas este lunes 22 de junio por lo que se le indicó que no debía presentarse al trabajo y en su lugar, debía buscar asistencia médica. La prueba se la practicaron en la Clínica Moreno Cañas y la misma dio positivo. Desde ese momento el funcionario se mantiene en aislamiento en su domicilio.

La infectóloga explicó que el estudio de los contactos abarcó del jueves 18 de junio hasta el lunes 22, con el objetivo que el rastreo fuera amplio y sensible, sin embargo, se determinó que la infección se adquirió en la comunidad, ya que no se logró identificar nexo hospitalario.

El funcionario vive en la zona de Mata Redonda, no viaja en bus ya que su desplazamiento al trabajo lo realiza a pie, y en su núcleo familiar no hay enfermos de COVID-19, ni tampoco se identificó ningún otro funcionario positivo.

Al siguiente día, al conocerse el resultado, la Unidad de Vigilancia Epidemiológica y Prevención y Control de Infecciones inmediatamente aplicó las medidas según la guía de Manejo de Brotes en establecimientos de salud, indicó la doctora Marcela Hernández de Mezerville, coordinadora de esta unidad.

También en CEACO

Antier, la Caja también reportó que ya eran seis los funcionarios del Centro Especializado de Atención de Pacientes COVID-19 (Ceaco) que habían dado positivo en la prueba de coronavirus, y que aunque aún se investiga la fuente del contagio, lo único que se ha podido establecer es que no hay vínculo entre las personas positivas.

Luego de que el 18 de junio una enfermera del hospital especializado diera positivo en la prueba de COVID-19, el antiguo Cenare instauró el 22 de junio un tamizaje aleatorio preventivo para detectar y aislar tempranamente aquellos funcionarios que resulten positivos.

El doctor Roberto Aguilar Tassara, director del Centro Nacional de Rehabilitación (Cenare) dijo que todos los contactos de la enfermera infectada dieron negativo, sin embargo, el tamizaje aletorio detectó cuatro funcionarios infectados en condición asintomática y dos que cumplían con la definición de "caso sospechoso" establecida por el Ministerio de Salud.

La epidemióloga del Ceaco, Laura Blanco Chavarría, afirmó que como parte de la investigación que realizan la Comisión de Vigilancia Epidemiológica, el Comité de Infecciones Intrahospitalarias y el Comité de Salud Ocupacional, desde ayer se aplica un tamizaje en todos los servicios, comenzando por el de enfermería con el objetivo de cortar transmisión y asegurar que el personal que trabaja esté saludable.

De los nuevos seis casos se identificaron 14 contactos y aunque algunos ya tienen prueba negativa de COVID-19, deberán seguir en cuarentena.