La Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (ARESEP) anunció este jueves que pedirá cuentas a los operadores de servicios públicos por el incremento en los montos de facturación de los usuarios de los servicios de agua y luz, que han desencadenado un aumento en las quejas durante el periodo de aislamiento por la pandemia de COVID-19.
Según la institución en un comunicado de prensa enviado este jueves, en los seis meses que lleva el 2020 ya se han reportado 96 quejas en electricidad, mientras que durante todo el 2019 las quejas fueron apenas 138. En el caso de los servicios de agua, la institución reporta 124 quejas, principalmente del AyA (104) y en la Empresa de Servicios Públicos de Heredia (ESPH).
De hecho, solo en el mes de mayo se presentaron 41 quejas por temas relacionados a facturación.
El detalló el Regulador General, Roberto Jiménez Gómez “estamos sumamente preocupados por la gran cantidad de quejas que reportan los ciudadanos por altos cobros en sus recibos de agua y luz” y por ello se tomó la decisión analizar individualmente cada uno de los casos, pedir explicaciones a los operadores (especialmente al AyA que es el que más quejas acumule) y, cuando haga falta, realizar inspección evaluar los resultados de cada denuncia.
Según el jerarca de ARESEP, se está pidiendo explicaciones a las empresas para que informen las acciones correctivas y revisiones a sus sistemas, así como el protocolo de atención de quejas y consultas de la ciudadanía, pues otra situación que reporta la ciudadanía es que no son atendidos por los operadores, o que no reciben respuesta.
En estos momentos, la ARESEP registra un incremento del 55% en las consultas que recibe diariamente en las diversas plataformas de atención: línea telefónica, Whatsapp y el correo electrónico, que pasaron de 105 consultas a 190.
Es importante indicar que según la Autoridad Reguladora, mientras se tramita la queja por alto consumo no procede el cobro ni la suspensión del servicio.
Aumento normal de consumo
Al lado de la apertura en las investigaciones por las quejas relacionadas a facturación, la ARESEP recordó que los incrementos en los consumos experimentados por el sector residencial pueden estar explicados por una serie de factores concurrentes, relacionados también al periodo de confinamiento provocado por la pandemia.
Como las familias pasan más tiempo en sus hogares, es normal que los miembros de estas consuman más agua para todas sus necesidades de alimentación, limpieza, recreación y otras; además, las medidas recomendadas por las autoridades de salud implican un mayor de consumo de agua como lo son la desinfección de los espacios y el lavado de manos, entre otros; además, ARESEP también señaló que la época de verano normalmente implica mayor uso de agua y acuñó que también podrían haber fugas y desperdicio afectando las facturaciones finales.
Por eso la Autoridad aconsejó a los abonados conocer cuántos metros cúbicos y kilovatios hora consume la familia, para detectar cualquier cambio, recordando que además, un aumento en el consumo también podría significar el pago del impuesto al valor agregado (IVA) en el servicio.
Jiménez concluyó señalando que existe una responsabilidad compartida, por un lado de parte del usuario que debe ser responsable en el uso de los servicios públicos, y por otro lado, de parte de las empresas tienen que mantener sus sistemas de control confiables y procurar la atención de las consultas de los usuarios.