Según informó hoy la Agencia Antidopaje Rusa y el medio de noticias TASS, el entrenador ruso de judo, Suleim Mutalíev, recibirá una suspensión de cuatro años por suministrar metilhexanamina a los atletas que entrenaba. Ambas fuentes indicaron que el período de descalificación del entrenador se contará a partir del 13 de febrero de 2020.
La infracción se dio hace un año durante el campeonato del Norte del Cáucaso celebrado en la ciudad de Nazrán. Margarita Pajnótskaya, subdirectora de la RUSADA, indicó a la agencia TASS:
Durante la competición el técnico les dio a los deportistas una bebida que contenía una sustancia prohibida. Según ambos deportistas, ellos desconocían que la bebida contenía el producto".
Pese a esta declaraciones, los deportistas también recibirán una sanción de dos años por consumo de sustancias ilegales.
A raíz del documental Icarus de Netflix (2017), la Agencia Mundial Antidopaje inició una profunda investigación y a finales del 2019, emitió una sanción que excluía al deporte ruso de los Juegos Olímpicos de Tokio 2021, Juegos Olímpicos de Invierno 2022 y el Mundial de Qatar 2022. El judo de Rusia, que logró dos oros y un bronce en Río 2016, no se escapa de esta sanción y por ende, solo los atletas limpios podrán participar con bandera neutral en Tokio 2021.