Mario Devandas, miembro de la Junta Directiva de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) representante del sector de los trabajadores afirmó este miércoles que el Ministro de Hacienda, Rodrigo Chaves, y el presidente del Banco Central de Costa Rica (BCCR), Rodrigo Cubero, dijeron que "no se podía hacer nada para salvar a la Caja".
A través de una publicación en sus redes sociales, Devandas relató que esta tarde la Junta Directiva de la CCSS sostuvo una reunión con el Presidente de la República, Carlos Alvarado; el ministro de Hacienda y el presidente del BCCR, para tratar la situación financiera de la institución, la cual está en agravación por la pandemia de COVID-19.
"La posición del Ministro de Hacienda y del Presidente del Banco Central fue que no se podía hacer nada, que el país no puede quebrar para salvar a la Caja", relató Devandas, al tiempo que afirmó que el presidente Alvarado fue "más conciliador" y afirmó que él estaba comprometido con el fortalecimiento y desarrollo de la institución.
Alvarado -según Devandas- propuso crear un equipo bilateral para buscar soluciones con creatividad, sin embargo, afirmó que de parte de la Junta Directiva de la CCSS se hicieron propuestas que fueron rechazadas de manera tajante por el Ministro y el Presidente del Central. El directivo no detalló cuáles fueron esa propuestas.
Se abre una nueva y gigantesca lucha. Ahora que se ha demostrado de manera palmaria lo que significa la CCSS para nuestro pueblo, hay quienes no se detienen a meditar y buscar soluciones para evitar su quiebra. Tenemos que unir fuerzas y empezar a levantar la voz. Esto no lo podemos permitir.
El presidente de la CCSS, Román Macaya, afirmó ayer que en diciembre la institución tendría pérdidas multimillonarias de ingresos en el régimen de pensiones por Invalidez, Vejez y Muerte (IVM), lo que haría que por primera vez en la historia de la institución tenga que tocarse la reserva de 2,1 billones de colones para pagar las pensiones actualmente vigentes.
Los recursos de la CCSS se han reducido por la desaceleración económica y ahora por la pandemia de COVID-19. Además, tomó la decisión de reducir en un 75% la Base Mínima Contributiva para el Seguro de Salud y Maternidad (SEM) y para el régimen IVM.