Daniel Soto Castro, viceministro de Planificación presentó su renuncia al cargo la noche de este martes, luego que iniciara en el Congreso la discusión de una moción de censura en su contra por haber firmado el decreto ejecutivo que creó la Unidad Presidencial de Análisis de Datos (UPAD).

Delfino.cr tuvo acceso a la carta de renuncia que fue firmada esta noche y dirigida al Presidente de la República, Carlos Alvarado Quesada.

Con esta renuncia suman dos las salidas en el gabinete registradas este martes, ya que hace unas cuantas horas el viceministro de Hacienda, Juan Alfaro, también renunció a su cargo tras reconocer que su nombre fue usado sin su autorización para un borrador de convenio entre la UPAD y la Superintendencia General de Entidades Financieras (Sugef).

Soto Castro expuso en su carta que hoy las circunstancias convocan a reflexionar sobre los últimos acontecimientos y tomar decisiones al respecto.

"Por razones circunstanciales, e incluso injustas -en mi opinión-, el nombre del suscrito ha sido objeto de cuestionamientos por la firma del Decreto Ejecutivo N°. 41996-MP-PLAN, los cuales han derivado en investigaciones legislativas, judiciales y administrativas, como la que usted ha ordenado. Con la conciencia absolutamente tranquila y con una profunda convicción de no haber actuado de manera anómala, pero sobre todo con un marcado interés en que estas investigaciones se lleven de la forma más normal, objetiva, transparente, imparcial y justa, he decidido presentar mi renuncia al cargo de Viceministro de Planificación Nacional y Política Económica", dice la misiva.

Soto motiva su salida en obtener un resultado favorable en las investigaciones, "como el que esperaría cualquier persona que sabe que sus actos se han realizado siempre apegados a la integridad y la ética, pero en especial, me interesa que dicho resultado sea contundente, libre de cualquier cuestionamiento o dudas que pudiesen originarse a partir del cargo que ostento".

Su renuncia se hará efectiva a partir del próximo 1 de abril del 2020, según finaliza la carta. Dicha medida, según él, obedece a garantizar una transición ordenada y no abrupta en favor de la persona que le suceda en el ejercicio del cargo.