El Presidente de la República, Carlos Alvarado Quesada, envió una carta a la ONU, el Banco Mundial, el Fondo Monetario Internacional, el BID, el CAF y el BCIE,  solicitándoles ayuda para sostener la economía después de la crisis sanitaria que vive el mundo por COVID-19. El planteamiento argumenta que estos organismos fueron creadas en las postguerra con el fin de enfrentar momentos complicados, como el actual.

Para atender las necesidades de los países en vías de desarrollo y con poco espacio fiscal, abogo ante ustedes, pensando en los más vulnerables. Resulta urgente complementar el fondo creado a inicios de marzo para bancos centrales, con el fin de atender eventuales crisis de reservas, con una facilidad de financiamiento presupuestario extraordinario para países como el mío y muchos más”, expresó el mandatario.

Asimismo, Alvarado Quesada recalcó que el principal problema es el de mitigar la curva del crecimiento del COVID-19 para evitar la saturación de los sistemas de salud, no obstante también es fundamental sostener la economía.

Así como los médicos no deberían decidir a quién dar un respirador y a quién no, los gobernantes, que también hemos jurado proteger a nuestros pueblos, no deberíamos tener que escoger entre la curva de mitigación ante el COVID-19 y salvar nuestras economías y nuestra viabilidad fiscal. En la era de mayor avance tecnológico, interconectividad y acumulación de la riqueza que ha logrado la humanidad, no es aceptable que debamos enfrentar este dilema”, detalló el presidente.

En ese contexto, propone flexibilizar las valoraciones sobre la situación fiscal de los países, de tal manera que se contemple un incremento sustancial del déficit, siempre y cuando sea el resultado de esfuerzos para evitar la desaparición del parque empresarial y el empobrecimiento resultante del desempleo, vinculados al deterioro económico causado por la estrategia para combatir el COVID-19.

También insiste en que los términos de la asistencia financiera otorgada en este contexto deberían ser excepcionales en cuanto a interés, período de gracia y tiempo de pago, es decir, el interés más bajo y los plazos más amplios. "Debe a avanzarse con un arreglo de pago de las carteras existentes, y eventualmente disponer la suspensión de pagos", puntualizó.