La solicitud que la Liga Agrícola Industrial de la Caña de Azúcar (Laica) realizó al Ministerio de Economía, Industria y Comercio (MEIC) el año anterior, con el fin de imponer aranceles adicionales al azúcar importado, volvió a la palestra este lunes luego de que la institución gubernamental convocara a las partes a audiencia esta mañana.

Actualmente, y según informó el diario La Nación el año anterior, el azúcar en Costa Rica tiene precio liberalizado, es decir que se mueve conforme la oferta y la demanda.

Lo que Laica busca con la petición realizada el año anterior, es imponer una tasa adicional a las importaciones de azúcar, a fin de proteger a la producción interna y evitar que ingresen productos desde el exterior a precios más bajos de los que tiene el producido aquí.

Sin embargo, el tema ha levantado roncha fuerte entre los importadores de azúcar, pues estos aseguran que la iniciativa tiene aspiraciones monopólicas que vendrían a afectarles.

Así lo han manifestado las partes importadoras, entre las que destaca la empresa La Maquila Lama, que asegura que el impuesto lejos de proteger al productor, terminaría sintiéndose en la bolsa del consumidor final.

En un comunicado de prensa, enviado previo a la audiencia de este lunes (en la que también participaron representantes de los gobiernos de Brasil y Canadá, nuestras principales fuentes de azúcar importada) el gerente general de La Maquila Lama, Juan Carlos Sandoval, aseguró que no existen los elementos necesarios para el establecimiento de una nueva medida de salvaguardia:

Lo que alega Laica es que la existencia de importaciones masivas daña la industria azucarera, un argumento totalmente lejos a la realidad, lo que tenemos es un sector acostumbrado a no tener competencia y que les había permitido aumentar los precios constantemente, esto antes de nuestro ingreso al mercado, en claro perjuicio hacia el consumidor costarricense”.

La Maquila Lama además aseguró que "de imponerse este arancel se eliminaría el escaso comercio internacional de azúcar que se realiza en Costa Rica, consolidándose la posición monopólica de Laica y esto solo podría generar aumentos en el precio al consumidor".

En el lado opuesto de la acera, por su parte, Laica señaló que es falso que la salvaguarda vaya a subir el precio final del azúcar que paga el consumidor, y en un comunicado publicado el fin de semana, el director ejecutivo y de comercialización de la Liga, Edgar Herrera, señaló que las razones de la solicitud se deben a que:

El sector está atravesando una situación muy complicada a raíz de las importaciones, hay ingenios que ya cerraron, una gran cantidad de pequeños productores han salido de la actividad y se han perdido miles de empleos en zonas rurales. Es urgente que el Gobierno tome medidas. Una salvaguardia puede salvar a miles de productores sin afectar a los consumidores. Nuestro planteamiento es técnicamente muy sólido y está muy bien fundamentado en la legislación nacional e internacional aplicable”.

Así las cosas, ahora será el MEIC y el despacho ministerial de la institución el que emita un dictamen respecto a esta polémica. Dicho dictamen, según informó CRhoy este lunes, vence su plazo el próximo 30 de mayo, por lo que habrá que estar atento a cómo avance el asunto en los próximos meses.

Tras la audiencia oral de este lunes, la asesora legal de la empresa La Maquila Lama, Lucrecia Brenes, afirmó que:

Lo que hemos tenido es una exposición sobre es si conviene o no la aplicación de un nuevo impuesto a la importación del azúcar, de ahí que es importante recordar que la importación ya mantiene una alta carga impositiva, pues se paga un arancel de 45%, más un impuesto de 1% y, adicionalmente se fijó una medida antidumping de 3,67%. Somos el segundo país en tener los impuestos más altos a la importación del azúcar y hoy el sector azucarero alega que existe un daño con unas escasas importaciones que no superan las 10 mil toneladas y quieren un nuevo impuesto".

Brenes además aseguró que "no existen los requisitos para establecer una medida de salvaguardia, no hay ni importaciones masivas y tampoco existe daño a la industria nacional", pues:

Uno de los argumentos de la industria azucarera es que cuando no se vende el azúcar en el mercado local, hay que venderla en el exterior y nos han dado un precio de venta que es un 45% por más bajo afuera que el precio que los azucareros le dan al consumidor costarricense, esto significa que somos los costarricenses los que estamos subsidiando el azúcar que se vende en el mercado internacional, es decir, que desde nuestros bolsillos tenemos que pagar para que los extranjeros tengan un azúcar más barato de lo que recibimos en el país".

Según la empresa importadora, el consumo de azúcar en el país esta cayendo por otras razones diferentes a las que LAICA señala y por eso y por la afectación a su sector, es que se oponen a esta solicitud cuyo resultado final conoceremos hasta que el MEIC resuelva la última palabra.