La contralora General de la República, Marta Acosta Zúñiga, se presentó el día de ayer ante la Comisión de Ingreso y Gasto de la Asamblea Legislativa para hablar de la ejecución presupuestaria del Patronato Nacional de la Infancia (Pani), y aprovechó su visita para presentar los resultados del más reciente informe de auditoría publicado el lunes de esta semana, y que auditó a la institución entre el 2016 al 2018.
Según informó la Contralora, los ingresos que son asignados al Pani como transferencia corriente del Estado crecieron entre el 2015 y el 2018 en un 131,8%, y tomando en cuenta todas sus fuentes de recursos los ingresos de la institución crecieron en un 119% durante ese periodo de tiempo. Esos aumentos fueron resultado del mandato de los tribunales y la Sala Constitucional, que forzaron al Estado a cumplir con sus obligaciones de transferirle el 7% del impuesto sobre la renta al Pani, lo que fue ya modificado por la reforma fiscal.
Esto generó que para ese periodo se registrara un crecimiento del superávit libre de la institución de un 30.9%. El total de ingresos ejecutados aumentó en un 63%.
La Contralora señalo que al finalizar el 2018 el PANI tenía un superávit cercano a los 18 mil millones, 22% de su presupuesto, a pesar de que no ha recibido la totalidad de los recursos que le corresponden, pero la contralora sentenció: “La información expuesta demuestra que una mayor cantidad de recursos no significa un aumento en la capacidad institucional para realizar una adecuada ejecución presupuestaria y financiera”.
Sobre el informe, la contralora señaló a los diputados:
- Las acciones ejecutadas entre 2015 y enero 2017 no tenía un Plan Estratégico.
- La Junta Directiva del Pani aprobó en febrero del 2017 el Plan Estratégico del Pani para el periodo 2015-2020, sin que estuvieran definidas las metas concretas y los indicadores para la implementación de la estrategica.
- En la atención de denuncias se redujo el nivel de cumplimiento de los tiempos establecidos por el Pani, siendo que en 2015 el 58% de las denuncias se atendieron dentro del plazo de tiempo, pero para 2018 esta cifra había caído al 28%, a pesar de que en ese periodo de tiempo aumentaron los recursos asignados a la institución.
- En 2016 el Pani aumentó las transferencias a organizaciones no gubernamentales (ONGs) que dan albergue a menores por un monto de ₡2.900 millones, pero esto solo generó ese año 93 cupos adicionales.
Sobre los resultados encontrados por la auditoría, en relación a la gestión del Pani, Acosta apuntó:
Hace falta visión, planificación, gestión eficiente, y sobre todo, la sensibilidad necesaria para aprovechar los recursos, recursos que de por sí son muy escasos para proteger a los niños, las niñas y adolescentes de este país que se encuentran en situación de vulnerabilidad.
Ante las preguntas de los diputados, la contralora admitió que a su criterio el Pani queda debiendo, y a pesar de que el Estado ha aumentado los recursos que le transfiere, la institución no ha logrado cumplir ni siquiera con sus metas operativas y añadió:
A mí lo que me preocupa es que ya han pasado muchos años, desde que empezó a recibir los fondos, y no hemos visto una reversión de la situación, sino que más bien empeoró, porque el año pasado se ejecutó un 63% del presupuesto del Pani, es uno de los niveles más bajos.
El informe detalla además que entre el 2015 y 2018, se incorporaron 173 nuevas plazas nuevas a las oficinas locales; no obstante, la asignación se hizo sin seguir las recomendaciones del estudio de necesidades de recurso humano elaborado en el 2016 por el PANI.
El gerente del Área de Servicios Sociales de la Contraloría, Manuel Corrales, uno de los autores de la auditoría y quien acompaño a la contralora recordó durante la audiencia que la rectoría política del tema niñez y adolescencia en el país lo ejerce el Consejo Nacional de la Niñez y Adolescencia, donde están representadas 33 instituciones públicas, y que también tiene deficiencias en su gestión que ya han sido señaladas por la Contraloría en el pasado, por la desarticulación de todas las instituciones que intervienen.
¿Cuánto dinero transfiere el Pani a ONGs para la atención de menores?
Durante la ronda de preguntas la diputada Paola Vega, hizo enfasis en la necesidad de supervisar a las ONGs que reciben recursos estatales para velar por el buen uso de los recursos en el cumplimiento de las necesidades del país.
Según detalla el informe de auditoría, entre el 2015 y el 2018 los recursos que otorga el Pani a las ONGs aumentaron en un 59%, alcanzando en 2018 la cifra de ₡15.594 millones transferidos, sin embargo, durante ese mismo periodo de tiempo la cantidad de cupos disponibles en las ONGs para atender menores de edad solo creció en un 26%, y ese crecimiento se dio mayoritariamente durante el año pasado.