Varios suscriptores nos hicieron saber que estaban molestos por la cobertura que hicimos de lo sucedido el 25 de julio en Guanacaste. Su reclamo es válido y comprensible y quisiera dejar claro eso: es normal que tengamos distintas opiniones en torno a lo sucedido y es valioso que podamos intercambiarlas.

Un dato que me llamó la atención es que la mayoría de cartas con reclamos que recibí por nuestra posición editorial frente al exabrupto del presidentevinieron de personas mayores. Algunas estaban muy enojadas con nuestras observaciones, en las que recriminamos la reacción del mandatario. Leí todas esas cartas con respeto e interés (de verdad, nada cuesta). Y entiendo. De verdad entiendo.

Entre otras cosas entiendo que vienen de otro lugar, de otro contexto, en el que están incluso —hasta cierto punto— normalizadas estas conductas. Ese lugar en el que algunos pensaban que Pepe Figueres "sí que tenía huevos" porque madreaba a la gente en la calle, por dar un ejemplo obvio. Sucede que los...