Escuche la versión en audio de este Reporte (para suscriptores D+)

— La alerta sobre el aumento en las denuncias por agresiones sexuales elevó sus decibeles luego que trascendiera que el sábado pasado se produjo una violación durante una fiesta en un bar en La California y que se hicieran públicas las astronómicas cifras de denuncias por acoso sexual que ostenta la UCR.

— Tras la denuncia del caso del profesor de la Facultad de Derecho Mainor Salas, en el Semanario Universidad la semana pasada, La Nación dio a conocer que la iniciativa Me pasó en la UCR recibió, solo en los último 8 meses, 145 denuncias por abusos sexuales en las aulas universitarias.

— Por ese motivo las federaciones estudiantiles de tres de las universidades públicas, la FEUCR, la FEUNA y la FEITEC, convocaron a una conferencia de prensa ayer, en la que pidieron una declaratoria de emergencia ante el acoso sexual en las universidades para ponerle (¡al fin!) un alto a la situación.

— Esto debido a que parece que tenía que venirse un terremoto escala Mainor Salas para que las cosas empezaran a cambiar pues ayer, poco después de la conferencia, la Facultad de Derecho de la UCR emitió un comunicado en el que señalan que se decidió —como medida cautelar mientras la investigación avanza— la deposición de los cursos que impartía Salas, así como de los trabajos de tesis que él dirigía y que serán ahora llevados por el decano de la Facultad, Alfredo Chirino.

— Aunque la noticia no deja de ser un halo de luz este está lejos de ser suficiente para borrar la oscuridad que nos dejó este fin de semana, en el que las denuncias por violencia sexual en nuestras calles empeoraron. Como ustedes recordarán, hace un par de semanas publicamos un video en el que les hablábamos de casos en los que a varias personas, la mayoría chicas, les estaban alterando la bebida en varios bares capitalinos con el fin de abusarlas sexualmente; pues bien, esta semana la situación empeoró pues se reportó que una mujer fue violada en el baño del bar El Wok (Barrio La California).

— La información, que empezó a circular a partir de varias publicaciones en Twitter, nos fue confirmada este lunes por el departamento de prensa del Organismo de Investigación Judicial que afirmó que, efectivamente, este fin de semana la joven agredida interpuso la denuncia ante el OIJ.

— Y aunque en Twitter se dijo muchísimo respecto al caso (incluso que hubo presencia de un oficial del OIJ, a pesar de que la administración del bar aseguró que conoció de la denuncia por medio de redes sociales), lo cierto es que como la investigación sigue en proceso, en el Organismo no nos dieron más información que la existencia de la denuncia. Lo que tenemos es lo que la administración de El Wok señaló en un comunicado emitido en sus redes:

Acudimos de inmediato al Organismo de Investigación Judicial para ponernos a su disposición, para colaborar con su trabajo. Como parte de la colaboración ofrecimos a los investigadores los videos de las cámaras de circuito cerrado, que justamente instalamos en procura de la seguridad de nuestros clientes, así como cualquier otra prueba que facilite la investigación, siempre respetando la confidencialidad de cualquier presunta víctima.

— El tema aquí es, entonces ¿qué hacemos si el próximo fin de semana, alguno de nosotros o alguno de nuestros familiares o amigos, se enfrenta a algo así, mientras está tomándose una cerveza en un bar? ¿Qué hacemos si nos damos cuenta que nos echaron algo en la bebida, como también se denunció esta semana? Ayer Vaso Lleno nos colaboró para esta nota preguntando en sus redes sociales, si alguien tenía mayor información sobre casos similares al reportado en El Wok y el resultado fue, nuevamente, espeluznante: son decenas de decenas de decenas de testimonios sobre situaciones similares. ¿Cómo afrontarlas si nos toca a alguno de nosotros?

— Según nos manifestó ayer el viceministro de Seguridad, Eduardo Solano, con quien hablamos para profundizar sobre el asunto, esta es una situación muy muy complicada. Aquí tenemos dos tipos de casos: esos en los que la denuncia se hace inmediatamente después de que el hecho se consuma y por tanto, se puede atender a la víctima y sitiar la escena de una vez, y otros en los que, como les comentábamos en el video, la víctima es drogada y despierta horas después, lejos de la escena y sin saber muy bien qué le pasó. En ambas escenas es indispensable que la víctima llame al 9-1-1 y que acuda de inmediato un hospital. Esta situación se refuerza en el primero de los casos, donde la víctima denuncia al momento, pues aquí todavía es posible sitiar la escena y darle más pistas al OIJ para determinar al culpable del agravio.

Siempre es importante que cuando una persona se dé cuenta de situaciones de ese tipo, que acuda al 9-1-1 para que los policías lleguen y den una atención inmediata a la escena. Es importante porque los oficiales cuidan la escena que puede dar información importante al OIJ para determinar quién es el agresor. Entonces siempre es importante que si una persona tiene una información de ese tipo o una situación en proceso, llamen al 9-1-1.

— Solano agregó que la denuncia apenas la víctima sea consciente es muy necesaria pues "una persona que comete un delito de violación no necesariamente va a ir corriendo y se esconde, puede que vuelva o puede ser sistemático, también"; o sea que el victimario puede, o seguir "tranquilo" con su fiesta o puede ir a agredir a otra persona en otro lugar, que es "lo que sucede mucho en lugares abiertos, en fincas o en circunstancias de ese tipo". ¿Que hay gente que es capaz de agredir sexualmente a alguien, cambiar de bar y seguir la fiesta en otro lado? En un contexto donde hasta hace poco esto era culpa de la víctima porque "la culpa fue de ella por andar tomando" (como nos retratan muchos de los casos y testimonios que llegaron a Vaso Lleno), parece que sí.

— Además, el viceministro reconoció que, como la mayoría de las violaciones y abusos se dan dentro del hogar (el año pasado se reportaron 1539 violaciones y 3734 abusos sexuales contra personas menores de edad o incapaces) los protocolos de atención están planteados en esa línea, tema que se agrava en el caso específico de atención a San José durante la noche, pues los operativos se centran en atención y prevención de los delitos contra la propiedad (robos de celulares, carros o billeteras) que es lo que los mapas de calor de crímenes del Ministerio señalan con más fuerza para la zona.

— Por eso es que es tan necesario que nos cuidemos y hablemos del tema y que además, denunciemos. Es fundamental que si ustedes son víctimas o conocen a alguien que lo fue denuncien. Llamen al 9-1-1 y pongan de inmediato la alerta ante el OIJ. Varias de las chicas que escribieron a Vaso Lleno señalaron que han denunciado por la motivación que sintieron al ver que no estaban solas, ya muchas otras están dando el paso al frente. Entre más se hable y más se apoye, menos casos así tendremos que lamentar.

Bonus Track: De Amanda Segura Salazar: Es hora de poner la culpa en su lugar.

Hidden Track: La réplica a Boris Molina: abogado de Mainor Salas, que publicó una de las denunciantes del profesor, Claudia Rodríguez.

Esta nota es parte del Reporte: Alvarado visita Alemania, aumenta alerta por casos de acoso en universidades.