El presidente de Sudán, Omar al Bashir fue derrocado y arrestado por el Ejército este jueves, poniendo fin a un gobierno continuo de 29 años en la nación africana. Así lo confirmó el ministro de Defensa, Awad Ibn Ouf en un mensaje transmitido por la televisión nacional.
Según el ministro, el Ejército tomará las riendas del país por un periodo de dos años, para luego convocar a elecciones. Asimismo se declaró "estado de emergencia" en todo Sudán durante los próximos 90 días, la Constitución Política fue suspendida y las fronteras terrestres y el espacio aéreo del país estarán cerrados hasta nuevo aviso.
Sobre al Bashir pesan dos órdenes de captura de la Corte Penal Internacional por crímenes de lesa humanidad cometidos en la región de Darfur. Aunque fue detenido, se desconoce si el ahora exmandatario, que asumió el poder en 1989, será entregado para su juzgamiento.
El golpe de Estado inició a primera hora del jueves cuando vehículos militares ingresaron a un complejo del ejército donde se encontraba la residencia de al Bashir y procedieron a arrestarlo. Luego la televisión estatal interrumpió su programación habitual para anunciar que el Ejército leería un comunicado, lo que causó que miles de personas salieran a las calles a celebrar con frases como "ha caído", "hemos ganado", entre otras.
Las protestas contra el gobierno de al Bashir recrudecieron meses atrás como consecuencia del alto costo de la vida y el hartazgo de la población su gobierno. Asimismo, la represión de las protestas dejaron 38 manifestantes muertos.