Una periodista y politóloga argentina-suiza identificada como Carina Black, de 52 años, afirmó al diario estadounidense The New York Times que el expresidente de la República, Oscar Arias la abusó sexualmente en 1998 cuando el Nobel de la Paz visitó la Universidad de Nevada.

El relato de la mujer, cuya identidad fue divulgada por el periódico con su consentimiento, apareció en un reportaje que daba cuenta de la denuncia penal presentada por la ex miss Costa Rica, Yazmín Morales, segunda mujer que acusó a Arias ante la Fiscalía.

Black relató al Times que Arias había llegado a la Universidad de Nevada como ponente y que mientras llevaba al expresidente a reuniones y eventos en un momento se encontró sola con él en un elevador. Fue allí cuando, según el relato, Arias empujó a Black contra la pared del ascensor, puso sus manos en el pecho de la mujer e intentó besarla.

Lo empujé y lo golpeé en la cara

--Carina Black, periodista y politóloga en su relato a The New York Times.

La mujer dijo que como en ese momento no resultó herida, decidió no presentar una denuncia formal contra el expresidente, sin embargo, optó por contar su historia ahora para que la gente crea en los relatos de las otras mujeres que han acusado a Arias de violación, acoso y abuso sexual.

El Times contactó a una de las abogadas de Arias para que se refiriera al tema, sin embargo, según el reportaje, la mujer de apellido Valladares dijo que dado que hay dos denuncias penales presentadas en la actualidad no harán comentarios al respecto.

Exministros de Justicia se negaron a representar a denunciante

La ex miss Costa Rica, Yazmín Morales afirmó a The New York Times que tras ser abusada por Arias en su casa de habitación buscó abogados que pudieran representarla para denunciar al exmandatario, sin embargo, varios de ellos se negaron.

Durante esa búsqueda, Morales descubrió que todos los abogados a los que había acudido tenían algún tipo de conexión con Arias y que, inclusive, dos de ellos habían sido ministros de justicia de Costa Rica. Aunque no reveló su nombre, dijo que uno de ellos se había postulado para la Presidencia de la República.

Según el reportaje del medio estadounidense, uno de los abogados le dijo a Morales que era amigo de la esposa de Arias. Otro le indicó que no tomaba casos de abuso sexual y un tercero le dijo que estaba demasiado ocupado.

Cuando Morales decidió volver a buscar asesoría legal para presentar la denuncia, este año, otros dos abogados también se negaron.

Inclusive, Arcelio Hernández, el abogado que finalmente accedió a representar a Morales contó al periódico estadounidense que varios colegas le llamaron para advertirle que no tomara el caso.

Lista de denunciantes crece

La lista de mujeres que han denunciado haber sido víctimas de comportamientos sexuales inadecuados por parte del dos veces Presidente de Costa Rica y ganador del Premio Nobel de la Paz ha ido creciendo día con día.

La primera en hacerlo fue una activista antibélica y médica de un centro hospitalario nacional, quien denunció penalmente a Arias por violación y dio a conocer su caso a través del Semanario Universidad.

A ella le siguió el relato de la periodista Nono Antillón, quien afirmó que Arias abusó de ella mientras trabajaba como asesora en la primera de sus campañas presidenciales. Más tarde, la directora de comunicaciones de la ONG, Human Rights Watch, Emma Daly, denunció que Arias le tocó los senos en el Hotel Intercontinental de Managua, Nicaragua.

La periodista de Revista Perfil, Mónica Morales relató en ese medio que durante una entrevista realizada al Nobel de la Paz, este le insinuó que se sentara en sus piernas para enseñarle unas fotografías.

De seguido, Marta Araya, editora del libro “Con velas, timón y brújulas” de Arias afirmó al periódico The Tico Times que Arias la hostigó sexualmente. Luego, la exreina de belleza Yazmín Morales presentó una denuncia penal contra Arias, en la que afirma que el expresidente se puso frente a ella, la agarró de la cabeza, la acercó con fuerza hacia él, le tocó los senos y le dio un beso contra su voluntad.