La Primera Ministra del Reino Unido, Theresa May, sobrevivió este miércoles a una moción de censura presentada por el Partido Laborista (oposición) después de la humillante derrota al acuerdo sobre el brexit ocurrido ayer martes.
Tras un intenso debate en el que el gobierno de May defendió su labor y solicitó ser apoyada por la cámara baja, compuesta por 650 miembros, la votación resultó en 306 votos a favor de la moción de censura, frente a 325 votos en contra de la misma, para una diferencia de 19 legisladores.
Con ese resultado, May podrá seguir al frente del gobierno del Reino Unido y tiene ahora el reto de intentar convencer a la Unión Europea de renegociar el acuerdo del brexit, rechazado anoche por 432 diputados, frente a 202 que lo apoyaron.
Si la moción de censura prosperaba, la Primera Ministra tenía 14 días para volver a ganar la confianza del Parlamento, de lo contrario, se convocarían a elecciones anticipadas.
El líder de la oposición Jeremy Corbyn le advirtió a May que el Partido Laborista no aceptará un brexit sin acuerdo, el cual según economistas causaría un desplome en la economía del Reino Unido peor al de la crisis del 2008.