En los próximos días en la Comisión de Económicos se decide el futuro del proyecto 21.017 “Ley de Impuesto sobre los Excedentes de las Asociaciones Cooperativas”, que busca gravar los excedentes de las asociaciones cooperativas. Este proyecto ha tenido una aceptación social importante, mas no una aceptación política, por lo que les presento “lo bueno, lo malo y lo feo” del impuesto a los excedentes de las cooperativas.

Lo bueno

La intención. La búsqueda de una mayor justicia tributaria resuelve un malestar –entre los muchos— que existen en temas tributarios por parte de los sectores productivos del país. Con una recolección de 6.500 millones de colones, se logra que las grandes cooperativas, clasificadas por su nivel de excedentes netos logren contribuir a las finanzas públicas del país de la misma manera que lo hacen cientos de empresas pequeñas, medianas y grandes a lo largo del territorio nacional y así de esta manera luchar en contra del principio de competencia desleal.

La diferenciación. Existen dos diferenciaciones que enmarcan este proyecto, primeramente la clasificación como se mencionó con anterioridad, y la tarifa, esta no llega siquiera al 30% que pagan las empresas con mayores utilidades en el sector privado, la razón de esta diferenciación es el respaldo al carácter social que posee el sector cooperativista.

Lo malo

Lobby y campañas. Como olvidar los 70 millones de colones para “defender” a las cooperativas durante el trámite del plan fiscal y así de esta manera escapar de la moción 374 o así como el lobby presente en los últimos meses por cooperativistas y exdiputados, para así frenar el proyecto 21.017. Por otro lado, ha existido campañas mediáticas, en las que se argumenta que las cooperativas si aportan al progreso del país, no se los discuto, lo que les discuto es el aporte al fisco por parte de las cooperativas (no cooperativistas). Asimismo, han existido campañas con mentiras y argumentos insostenibles por parte de uno que otro “periodista” que busca denigrar el objetivo del proyecto.

Lo feo

La insuficiencia. Al igual que la Ministra Aguilar, pienso que el proyecto es insuficiente y que se podrían recaudar los 12.000 millones de colones como se planteaba inicialmente en el proyecto 20.580 y en la moción 374. Esto mediante un sistema vertical en que las cooperativas paguen de manera progresiva y a escala PYME.

La palabra. El día 3 de octubre del pasado año, compañeros diputados firmaron un acuerdo multipartidista en que se comprometían a crear y apoyar un proyecto de ley en que se buscara gravar los excedentes de las cooperativas con más recursos, sin embargo, la realidad es otra, se ha percibido negatividad por parte de algunos compañeros hacia el proyecto en las diferentes sesiones de la comisión de económicos.

Por otro lado, existen argumentos como la doble imposición de impuestos por la que algunos diputados ven con recelo al proyecto, sin embargo, esta doble imposición existe en el sector privado mediante el impuesto de renta y el impuesto a los dividendos, esto a una tarifa mayor en ambos casos, por lo que aun existiría una ventaja hacia el sector cooperativista de aprobarse el impuesto a los excedentes.

La viabilidad política del proyecto es poca, como lo he dicho con anterioridad: “el lobby cooperativista surge efectos”. Sin embargo, la lucha va a continuar, desmintiendo argumentos, denunciando lobby y hasta redactando proyectos de ley, el Partido Unidad Social Cristiana seguirá buscando una mayor justicia tributaria y luchando en contra de la competencia desleal para el bien del país.

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