La magistrada de la Sala Primera y vicepresidenta de la Corte Suprema de Justicia, Carmenmaría Escoto Fernández, anunció este lunes su decisión de renunciar al cargo para acogerse a la jubilación.
Escoto envió un oficio a la Asamblea Legislativa en el que comunicaba su decisión de echar atrás la intención de ser reelecta para un nuevo periodo de ocho años, a partir de febrero del 2019 cuando se le vencía su actual nombramiento.
La magistrada de 68 años de edad había sido nombrada en el año 2002 y luego fue reelecta por el Congreso en el 2011.
Durante sus últimos meses de gestión, la magistrada debió asumir la presidencia interina de la Corte, luego de que Carlos Chinchilla Sandí renunciara al cargo.
"Estimo que las magistraturas no deben ser indefinidas en el tiempo. Es necesario dejar espacio a otras personas", señaló Escoto en su carta, la cual fue leída ante el Plenario del Congreso durante la sesión de la tarde.