— El día de ayer el diario La Nación denunció que un proveedor del Partido Republicano Social Cristiano (PRSC) entregó al Tribunal Supremo de Elecciones dos fotomontajes —bastante obvios— para ilustrar dos vallas que supuestamente fueron colocadas durante el periodo electoral.
— El diario señaló que el proveedor intentó cobrar al TSE 9 millones de colones por las vallas, como parte de un cobro total por 121 millones de colones. La Nación asegura que ambos espacios de publicidad nunca se colocaron. Incluso, vecinos de las zonas le indicaron al medio que en ambas vallas no existieron anuncios de ningún tipo durante el periodo electoral.
— El caso llegó ya está en estudio en el TSE. El jefe del departamento de Financiamiento de Partidos Políticos del TSE, Ronald Chacón, confirmó a Monumental que se encuentra en etapa de investigación.
— La publicación de Llorente generó diversas reacciones en las tiendas republicanas socialcristianas. El excandidato a la presidencia Rodolfo Hernández, por ejemplo, aseguró que de ser cierta la estafa pedirá la renuncia de los involucrados.
— Por su lado, el diputado y presidente del partido Dragos Dolanescu Valenciano —quien firmó el contrato por las vallas— subió un video a Facebook acusando a La Nación de mentir “una vez más”.
— “Es una barbaridad lo que hacen ustedes, acostumbrados a tratar de aplastar gentes que no se alinean a su ideología o a sus intereses, no señor, mi madre crió a un hombre, si creen que me voy a dejar están totalmente equivocados”, dijo.
— Además, escribió: “Armaron una novela con un reporteo flojo y tendencioso para ensuciar el nombre del Partido Republicano y mi trabajo como presidente de la agrupación. La periodista supone un intento de estafa , cuando lo que hubo aquí es un error humano”.
— Dolanescu asegura que podrá demostrar ante el TSE que no existe ninguna irregularidad y que todo se trata de un montaje de mal gusto. “Don Armando, vergüenza, qué bajo que está cayendo La Nación…”, dijo, antes de enviarle un desagradable y despectivo mensaje en señas…
Esta nota es parte del Reporte: Navas golpea la mesa de Soresco y Dolanescu entra en pleito con La Nación