— La Corte Plena se pronunció en contra del proyecto de Ley de Justicia, Solidaridad y Solidez de las Jubilaciones en Costa Rica (20.927) que pretende que todos los nuevos empleados públicos coticen para el régimen de pensiones de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS).

— Luego de conocer el informe preparado por la magistrada Marcela Allón (Sala II) un total de once magistrados manifestaron estar en contra del proyecto de ley en tanto consideraron que violenta la autonomía del Poder Judicial (que tiene su propio régimen de pensiones).

— Únicamente Román Solís Zelaya (Sala I) y Jaime Robleto (Sala III) indicaron que a su criterio la iniciativa no afecta la organización ni el funcionamiento del PJ. Los magistrados de la Sala Constitucional se abstuvieron de votar ante la eventualidad de que el proyecto les sea consultado.

— Según explicó Allón, el régimen de pensiones constituye uno de los principales activos para los empleados del Poder Judicial, así que si se eliminase, se podría afectar la permanencia de los trabajadores (“el régimen de pensiones del Poder Judicial ha evitado la fuga de personal valioso”). Ya saben, personal valioso como el expresidente Carlos Chinchilla. Ah no, ese sí se fugó... ¡pensión de lujo en mano! :)

— La posición de la magistrada fue respaldada por Fernando Cruz, presidente de la Corte (“Esto es muy serio”) y por Julia Varela, (Sala II) quien dijo que el Poder Judicial está bajo un ataque sistemático. ¿Del Poder Legislativo? Curioso comentario luego de que acaba de ser reelecta por el Congreso a pesar de todos los pesares.

— Los resultados de la decisión del la Corte ya ustedes los conocen: será necesario el voto de 38 diputados para que que se apruebe la ley. ¿O no? Pues... como bien indica en Barra de Prensa nuestro querido Luis Madrigal... #HAYTRUCO

Lo relevante acá no es que la Corte haya emitido pronunciamiento en contra, sino que lo haya hecho contradiciendo la jurisprudencia de la Sala Constitucional que ha delimitado una y otra vez los términos “organización y funcionamiento” del Poder Judicial

 — Lo más interesante (¿frustrante?) del caso en el país de Nunca Jamás (donde lo único “esencial” es la incerteza jurídica) todo importa y nada importa. La Sala ha dicho no una sino dos veces que el tema pensiones no afecta ni la organización ni el funcionamiento del Poder Judicial y sin embargo.... a) Los diputados igual van y mandan la consulta y b) La Corte igual va y dice que sí afecta.

— ¿Entonces? Se supone que la Sala tiene la última palabra y esa palabra es santa. ¿Cierto? Bueno. A veces sí. Y a veces no. Y a veces tal vez pueda ser que quizá de pronto... mientras tanto. Madre de Dios: qué congojón.

— Lo que es evidente es que cuando se habla de autonomía, de pensiones y de la reforma procesal laboral —y de quién sabe cuántos temas más— en este país por cada pieza de legislación hay 20 criterios... 30 interpretaciones y 0 formas de ponernos de acuerdo. Achará.