Costa Rica expresó este miércoles, ante la Organización de Estados Americanos (OEA), su consternación por la escalada de violencia y represión, que ocurre en Nicaragua.

En el ejercicio de la Presidencia del Consejo Permanente de la OEA, que ostenta Costa Rica, se convocó a una reunión ordinaria presidida por la Embajadora y Representante Permanente de Costa Rica ante la OEA, Rita Hernández, quien incluyó como punto de agenda la situación actualizada de la crisis en el país vecino.

"A la fecha, se reportan más de dos centenares de víctimas mortales, desapariciones forzadas, detenciones arbitrarias y la erosión sistemática de los derechos humanos del pueblo nicaragüense, así como la represión selectiva e intimidación contra manifestantes y sus familias; contra estudiantes, defensores y defensoras de los derechos humanos y miembros de la Iglesia Católica, entre otros. Cada uno de estos actos es inadmisible", pronunció la Ministra Consejera, Linyi Baidal.

La representante nacional instó a los países miembros de la OEA a volcar su mirada hacia Nicaraguapara que exista una pronta reacción y se atienda el tema, de forma periódica, ante el Consejo Permanente de la Organización.

Además, Costa Rica pidió al régimen de Daniel Ortega cumplir con todas las recomendaciones emanadas de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), especialmente las referidas al cese inmediato de la represión a los manifestantes y las detenciones arbitrarias de quienes participan en las protestas, así como el llamado a respetar y garantizar el goce pleno del derecho a la protesta, a la libertad de expresión, a la reunión pacífica y a la participación política de la población.  

“Encontrar una solución democrática en aras del restablecimiento de la paz y el pleno respeto a de los derechos humanos debe ser una preocupación compartida por todos los países miembros”, expresó Baidal.