El Presidente de la República, Carlos Alvarado Quesada, firmó este lunes la Ley de Justicia Restaurativa (Ley 9582) que fue aprobada por un mini-plenario de la Asamblea Legislativa días atrás, a pesar de las objeciones de varias instituciones.
Alvarado tenía hasta hoy para pronunciarse sobre si vetaría o firmaría la Ley en cuestión y finalmente, decidió confiar en la palabra de los diputados que se comprometieron a tramitar de forma expedita una reforma para subsanar los señalamientos hechos por parte de la Fiscalía General y del Instituto Nacional de las Mujeres (INAMU).
"Damos una oportunidad al diálogo entre los Poderes de la República para superar los aspectos que deben mejorarse en esta importante legislación y asegurarnos el interés público con la exitosa aplicación de la Justicia Restaurativa", manifestó el Presidente.
La iniciativa plantea establecer con carácter permanente la elaboración, aplicación y evaluación de políticas y procesos de justicia restaurativa, como medio alternativo de solución de conflictos en el Poder Judicial.
Sin embargo, algunos defectos de redacción causaron preocupación entre el INAMU y la Fiscalía General, por cuanto podría permitir que las mujeres víctimas de violencia doméstica puedan conciliar con su agresor.
Alvarado remitió una nota a la presidenta del Congreso, Carolina Hidalgo, donde señaló que aunque pudo haber implantado un veto y devolver al proyecto para que fuera subsanado, se optó por firmarlo, dadas "las manifestaciones de buena fe de los diputados y diputadas en pro de reformar la norma".
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