Los diputados volvieron a sus prácticas acostumbradas tras cesar el "efecto elecciones" que causó que, tras los resultados del 4 de febrero, muchos tuvieran (o al menos expresaran) intenciones creíbles de que -ahora sí- se trabajaría en llegar a un acuerdo que permita ponerle solución definitiva a la crisis fiscal que atraviesa Costa Rica.

En la Asamblea parece haber una ruta de consenso trazada: avanzar en el trámite de la reforma constitucional para introducir una regla fiscal que establezca que los gastos de la Administración Pública no pueden exceder los ingresos corrientes (con la excepción de gastos de inversión en obra pública) y, posteriormente, pasar a la discusión de impuestos.

La aprobación de esa reforma es la única forma en la que el Partido Unidad Social Cristiana permitirá la discusión de las reformas a los tributos de Ventas y Renta, sin embargo, su principal enemigo es el Frente Amplio, que alega que por cada punto de déficit fiscal a reducir mediante esa regla se debe...