¿Quién dijo ciencia?

“La ciencia es más que un cuerpo de conocimiento, es una forma de pensar, una forma de interrogar escépticamente al universo con una comprensión fina de la falibilidad humana.”  — Carl Sagan.

‘¿Quién dijo sexo?’ –de donde ya habrán adivinado que tomé el título de este texto– es un programa de Radio U dedicado a “dialogar sobre sexualidad con franqueza y amplitud, sin prejuicios ni tabúes”. Soy de la consideración de que en similares términos (con amplitud, sin prejuicios, con educación, etc.) se debería de conversar sobre política fiscal, pobreza, seguridad social, empleo y otros temas que aquejan al país. Y de esta misma manera se debe discutir de ciencia y con ciencia.

Aclaro. Vivimos en una era basada en ciencia y tecnología, por lo que al discutir de ciencia entendemos nuestra realidad, el futuro que nos depara y las posibilidades que tenemos para cambiarlo. Y dialogar con ciencia refiere a la libertad de pensar y expresarse, pero basados en un ejercicio sano y sencillo de observar y razonar antes de emitir conclusiones, lo que ahorraría muchas discusiones vagas y políticas públicas erradas.   

Ahora bien, observando los primeros debates, propagandas y entrevistas de cara a los comicios del 4 de febrero, pareciera que en el próximo mandato presidencial (2018-2022) la ciencia será ‘materia oscura’: se sabrá que existe, pero no cómo funciona. Y esto es algo que un país en vías de desarrollo no se puede permitir.

Me di a la tarea de revisar los planes de gobierno en lo que a ciencia y tecnología se trata y esto fue lo que, de manera muy simplificada, encontré:

Ciencia y tecnología en los planes de gobierno de los candidatos 2014-2018:

• PIN: Como dato curioso, la palabra ciencia ni siquiera aparece en su plan de gobierno. En cuanto a tecnología, el partido pretende utilizarla como herramienta en distintos ámbitos, pero no habla de forma aterrizada sobre desarrollo ni investigación científica y tecnológica.  
• PLN: El área de Ciencia y Tecnología (en adelante CyT) lo canaliza en dos ejes principales: (1) convertir a Costa Rica en un centro de atracción de investigación y desarrollo de CyT, particularmente en biotecnología aplicada a la salud; y su propuesta más fuerte es (2) fomentar la innovación y emprendimiento en torno al área de CyT.
• PUSC: Cuando comencé a darle una rápida ojeada a los planes de gobierno (a mitad de diciembre), este partido no había presentado el suyo. Por lo que accedí a su página web, ingresé a la pestaña “Propuestas”, luego a “Ciencia, Tecnología y Energía” y lo único que literalmente decía –y sigue diciendo– es “¿cómo?” Yo me pregunto lo mismo.En todo caso, en días más recientes y con el plan de gobierno a la vista, don Rodolfo Piza no tiene propuestas concretas en torno a CyT. Ni una sola.
• PRSC: Como el PLN, expone dos temáticas principales a este respecto: (1) establecer programas e incentivos de retención, atracción y reinserción del talento y (2) mejorar los programas de estudio de las Ciencias y la Matemática que se desarrollan en la Educación Media Académica y Técnica. Sin embargo, con el doctor Hernández ni soñar que Costa Rica pueda llegar a ser un referente en materia de CyT.
• PRC: Básicamente, lo único que indica el plan de gobierno de este partido político a este respecto es “mejorar el sistema de innovación y tecnología”, por lo que invito a los integrantes de esta agrupación a ingresar a la página web del PUSC, hacer click en la pestaña que dice “Propuestas”, luego a “Ciencia, Tecnología y Energía” y respondan la pregunta que ahí aparece.   
• PAC: En este tema, es el único partido que denota haber realizado un estudio para plantear sus propuestas. Su plan de gobierno expone 20 propuestas concretas en aras del desarrollo de la CyT, de la mano con herramientas de investigación y de eliminación de la brecha digital. Además, taxativamente hace alusión a las tecnologías emergentes a las que el país debe hacer frente.
• ML: Igual que el PUSC, a mediados de diciembre no había presentado su plan de gobierno. Sin embargo, el ML finalmente expuso un programa extenso de casi 400 páginas, de las cuales menos de 2 abordan estrictamente el tema de innovación tecnológica, planteando como propuesta principal apoyar los emprendimientos de base tecnológica. Ahora bien, sí presenta una sección de “Infraestructura de infocomunicaciones”, en la que expone el objetivo de convertir a Costa Rica en un país digitalizado mediante la apertura de la Agencia Nacional para la Promoción de las Infocomunicaciones y así tener un “verdadero” gobierno digital. No obstante, las propuestas fácilmente se identifican como insuficientes y pobres si el fin es que el país sea reconocido por su desarrollo científico y tecnológico.
• FA: Si bien su plan entiende la necesidad de producción de conocimientos y desarrollo de tecnologías, las propuestas concretas en torno a CyT son nulas. Se habla de una agenda de ciencia, tecnología e innovación, del cumplimiento de la legislación relacionada y de promover el acceso justo y universal de los recursos que el Estado invierte en estas materias; pero no expone un espectro visible de lo que podría hacer para realmente hacer desarrollar al país científica y tecnológicamente.  
• PNG: A pesar de dedicar 1 de 5 capítulos de su plan de gobierno a la “Tecnología e Innovación”, su exposición no va más allá de poder gozar del título de una ‘buena redacción para la prueba de redacción de bachillerato’. A lo sumo, se puede rescatar su propuesta de Gobierno Digital y Abierto, que no representa un avance en CyT, sino una herramienta para observar qué está haciendo el gobierno.  

Ante el panorama expuesto, la impresión inmediata es que el único partido que se preocupó por exponer propiamente una política científica fue el PAC, ya que las propuestas dejan entrever que detrás de la redacción de esa sección del plan de gobierno hay un grupo de personas que más allá de entender la importancia de la CyT, están inmersas en este ámbito. Ahora bien, no puedo dejar de reconocer que el PLN hizo un esfuerzo por transmitir el mensaje de que la innovación, de la mano con el emprendimiento, es un eje fundamental para dicho partido. La diferencia entre uno y otro partido radica en que el partido liderado por Carlos Alvarado plantea una política científica integrada, mientras que la agrupación que encabeza Antonio Álvarez es insistente en sus objetivos, pero de manera dispersa y repetitiva, no dejando un cuadro claro y ordenado de sus intenciones.

Ahora bien, lo que ni el PAC ni el PLN –ni menos aún cualquier otro partido de los expuestos– explicaron es cómo desentrabar el sistema burocrático y de gestión de la ciencia. Si bien los fondos públicos que se destinan a la ciencia, la innovación y la tecnología deben ser monitoreados, los científicos deben tener la posibilidad de dedicar al menos la mayoría de su tiempo a la investigación y no a trámites administrativos engorrosos. Poseer conocimiento no es suficiente para generar producción científica, también requiere de entusiasmo, de mentes libres y creativas y de la comprensión de que existe un grado de error en este oficio.

Finalmente, es preciso reconocer que nuestra clase política no tiene cultura científica por dos razones: (1) porque la ciudadanía no exige que este grupo salga de la ignorancia en estos tópicos, ni tampoco las y los políticos toman la iniciativa de educarse a este respecto; y (2) porque las y los científicos están alejados de la política. La responsabilidad es de cada uno de nosotros, mientras no nos eduquemos y exijamos con propiedad, las políticas sobre CyT van a ser tomadas por legisladores sin experiencia en ciencia; y, de cara al bicentenario, Costa Rica estará cada vez más lejos de ser la Suiza de ningún lugar y más cerca de padecer los bajos índices de desarrollo que se presentan en la región.

Y una vez más, Carl Sagan: “Si no somos capaces de hacer preguntas escépticas, de interrogar a aquellos que nos dicen que algo es cierto, de ser escépticos de los que están en la autoridad, entonces estamos a merced de cualquiera, del próximo charlatán político o religioso que viene deambulando… La gente tiene que ser educada y tiene que practicar su escepticismo en su educación, de lo contrario no dirigimos el gobierno, el gobierno nos dirige a nosotros...”

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