Al menos 40 personas murieron y más de 100 resultaron heridas luego que un grupo armado irrumpiera en la sala de conciertos Crocus City Hall de Moscú y disparara indiscriminadamente contra la multitud para después incendiar las instalaciones.

Según medios rusos el ataque tuvo lugar pasadas las 8 p.m. (hora local) cuando entre tres y cinco personas enmascaradas y con uniformes de combate entraron por la puerta principal del centro comercial donde se ubica la sala de conciertos, abrieron fuego con fusiles automáticos contra los presentes y luego se dirigieron al escenario donde el grupo de rock "Picnic" se aprestaba a iniciar un concierto.

Durante el ataque también se emplearon granadas o bombas incendiarias que desataron una explosión y posterior incendio de las instalaciones.

Amaq, portavoz de la propaganda del grupo terrorista Dáesh (Estado Islámico) informó que el grupo había reclamado la responsabilidad por el ataque según un comunicado publicado en redes sociales. Aunque la veracidad de las alegaciones no ha sido confirmada, el gobierno ruso investiga los hechos como un atentado terrorista.

Los perpetradores del ataque huyeron antes de que llegaran las fuerzas especiales y la policía antidisturbios. Según la prensa rusa, los efectivos de seguridad del centro comercial no portaban armas para repeler el ataque y fueron asesinados en los primeros momentos del asalto.

Las redes sociales rusas se llenaron de mensajes cuestionando cómo las autoridades, que vigilan y presionan implacablemente a los críticos del Kremlin, no lograron identificar la amenaza y prevenir el ataque.

La embajada de los Estados Unidos en Moscú había advertido desde el 7 de marzo a los estadounidenses que evitaran lugares concurridos, incluidos conciertos, debido a planes "inminentes" de ataques a grandes concentraciones de personas en la capital rusa.

Tras el ataque las fuerzas de seguridad del Estado redoblaron la seguridad en aeropuertos, estaciones de trenes y metro. Además, la alcaldía de Moscú ordenó cancelar de inmediato todas las actividades masivas, eventos en teatros y museos durante el fin de semana.

Mykhailo Podolyak, asesor del presidente ucraniano Volodymyr Zelenskyy, negó la participación de Ucrania en el ataque al salón de conciertos.

John Kirby, portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, dijo el viernes que aún no podía hablar sobre todos los detalles, pero que "las imágenes son simplemente horribles. Y es difícil de ver".

Nuestros pensamientos están con las víctimas de este terrible, terrible ataque a tiros.. Hay algunas madres y padres, hermanos y hermanas, hijos e hijas que aún no han recibido la noticia. Este será un día difícil.