Apenas un día después de que se confirmara que 25 funcionarios del Hospital de San Carlos tuvieran que ser enviados a aislamiento por exponerse a un paciente con COVID-19, este sábado en horas de la mañana la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) informó que otro grupo de 16 funcionarios también irá a cuarentena por un hecho prácticamente igual.

Según explicó la institución en un comunicado de prensa, el caso empezó cuando una mujer que ingresó al centro médico el 26 de mayo por un trastorno en el sistema nervioso, y que fue internada dos días después, desarrollara fiebre y al tomarle la prueba de COVID-19 esta dio positivo.

Según Edgar Carrillo Rojas, director médico de ese hospital, tras confirmarse el diagnóstico se activó el protocolo y se informó al Ministerio de Salud y las unidades técnicas de epidemiología regional y central de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) para las acciones de control de brotes e investigación de contactos.

En total, 16 médicos y enfermeras tuvieron contacto con la paciente y fueron enviados a cuarentena, lo mismo que cinco pacientes que estaban internadas en el Salón de Medicina de Mujeres del centro médico.

Carrillo dijo que ya se hizo la sustitución del personal, por lo que el hospital mantiene su capacidad operativa sin afectación de servicios; mientras que los pacientes aislados están estables y si tienen egreso y no presentan síntomas se les hará un seguimiento.

El galeno aseguró que se están extremando medidas ante posible ingreso de pacientes asintomáticos: "Debemos proteger al personal tanto en área de consulta de pacientes respiratorios como en el área donde se atienden otras patologías". 

Por su parte el doctor Melvin Anchía, epidemiólogo regional de la CCSS, reiteró que "se está realizando la contención epidemiológica tanto a nivel intrahospitalaria como a nivel de la comunidad donde residen los contactos, pacientes y familiares, a fin de aplicar las medidas epidemiológicas pertinentes".

Ayer la CCSS confirmó que 25 funcionarios fueron enviados a cuarentena luego de atender a un paciente que ingresó por descompensación de su enfermedad crónica, y que aunque afirmó no tener motivos para que se le considerara como caso sospechoso de COVID-19, desarrolló síntomas respiratorios mientras estaba en el centro médico y al tomarle la prueba esta dio positivo.