En el 2017, la Administración Solís Rivera nos mandó a hacer maletas porque el vuelo de un nuevo aeropuerto internacional, esta vez ubicado en el cantón de Orotina, estaba a punto de despegar. Dos años después, sin embargo, parece que no va a haber despegue, que no va a haber pista y que no va a haber nuevo aeropuerto.

Así se desprende de las declaraciones que el Ministro de Obras Públicas y Transportes (MOPT), Rodolfo Méndez Mata, dio el día de hoy a la prensa y en las que aseguró que:

Ciertamente, con el aeropuerto de Orotina se generó toda una especulación y una expectativa hace un par de años, pero las condiciones para la transferencia de un aeropuerto a otro todavía están muy lejos de ponerse en ejecución. Inclusive, la necesidad misma está en cuestionamiento".

Méndez brindó estas declaraciones tras informar sobre las nuevas inversiones en infraestructura aeropuertuaria, que el Gobierno arrancará en las próximas semanas, y que fueron comunicadas este jueves como parte de la "Semana de la Aviación".

En dichas inversiones se destinan, por ejemplo, ¢54.350 millones al Aeropuerto Daniel Oduber para los próximos cuatro años y otros ¢4.200 millones para el Tobías Bolaños en 2020; sin embargo, el gran ausente del anuncio es el aeropuerto de Orotina cuyo nombre ni siquiera aparece.

Al ser consultado al respecto, el jerarca del MOPT afirmó el Aeropuerto Juan Santamaría aún sigue dando abasto y, aunque ya no lo diera, la institución considera que el país no tiene las condiciones necesarias para implementar la política pública que se prometió hace dos años:

Los estudios que tenemos nos dicen que el Aeropuerto Internacional Juan Santamaría todavía tiene años de vida y por dichas es así, porque si nosotros quisiéramos tener en este momento otro aeropuerto que lo sustituya, lo cierto es que ni las condiciones económicas del país, ni los estudios son conducentes a adoptar esa decisión inmediatamente".

Interés público

La construcción del aeropuerto de Orotina, cuyo nombre oficial estaba programado para ser Aeropuerto Internacional Metropolitano de Costa Rica, fue declarado de interés público el 31 de mayo del 2017 por parte de la Presidencia de la República y de la anterior dirección del Ministerio de Obras Públicas y Transportes.

De acuerdo con las proyecciones del Ejecutivo en ese momento, los planes eran que la primera fase de la nueva terminal aérea estuviese lista en 2027 y que el total de las obras se concluyeran en 2047. Sin embargo, el cambio de administración trajo vientos que no fueron favorables para la consolidación de ese proyecto.

En febrero de este año, en una comparecencia ante la Comisión de Alajuela de la Asamblea Legislativa, el ministro Méndez Mata señaló que existían más dudas que estudios pertinentes, para garantizar el buen camino de este proyecto. En ese momento el jerarca señaló que "es imposible continuar como sucedió en el pasado, donde se empezaron a manejar proyectos sin que se tuviese toda la planificación necesaria para poder hacerlos andar bajo normas técnicas" y que por ello se decidió que es necesario contar con más estudios previos, antes de poner en marcha la construcción.

Además, en declaraciones brindadas a CRhoy en agosto pasado, Méndez agregó que los estudios de emplazamiento que el gobierno pasado mandó a elaborar con la empresa británica Mott Macdonald, y por los que se pagaron más de $1,5 millones financiados por la Corporación Centroamericana de Navegación Aérea, no son suficientes, pues "hay estudios adicionales que faltan por realizar para ese momento" (en el que se decida arrancar con la construcción).

Así, y a pesar de que en dichas declaraciones el jerarca aseguró que los estudios faltantes se iban a realizar en este gobierno y que en un año ya se podrían estar listos, después de lo expresado el día de hoy se da a entender que la decisión ya no va ir por esa vía, pues las complejidad y el costo del proyecto hacen imposible su culminación en el mediano plazo.

Por ejemplo, solo el estudio de viabilidad ambiental requerido, podría llegar a costar hasta 650 millones de colones, por ello y ante el panorama económico en el que estamos, es poco probable que el proyecto salga del freno en el que está.

Así, por lo menos, ya lo vislumbra la Municipalidad de Orotina que el pasado mes de octubre decidió retomar el plan regulador que había suspendido en 2016, y enfocar su trabajo a la consolidación de zonas francas en la zona, más allá de allanarle el espacio a una terminal aérea.

Continuidad en el Juan Santamaría y apoyo en Liberia

Uno de los aspectos que más ha preocupado respecto a la situación actual de los aeropuertos del país, es la capacidad del Juan Santamaría. Esta preocupación la ha acrecentado el propio Méndez Mata, cuando ha salido a señalar que dicha terminal "se va a llegar a agotar" y que, aunque eso no haya sucedido todavía, "es importante que se avance en los estudios para la construcción de lo que va a llegar a ser un reemplazo a ese agotamiento".

Sin embargo, parece que la política del MOPT para subsanar ese riesgo ahora irá más dirigida al fortalecimiento de lo que ya tenemos construido, antes de empezar algo nuevo, pues Méndez Mata aseguró que esta semana recibieron las propuestas de mejora de la empresa Aeris, concesionaria del aeropuerto alajuelense, y que por ello se enfocarán en fortalecer la terminar principal.

Además, y por otro lado, el MOPT anunció que fortalecerá al Aeropuerto Internacional Daniel Oduber Quirós, ubicado en Liberia, y que a partir de una mejora en la calle de rodaje, de la reconstrucción de toda la pista de aterrizaje de casi 3 km de longitud y del sistema eléctrico de la terminal, buscarán darle más aire a este puerto como segunda opción de llegada aérea.

En dicha terminal se destinarán recursos para más expropiaciones y así ampliar el espacio, y se invertirán ¢215 millones en la remodelación del edificio radar para este 2020; también se tienen presupuestados otros ¢1.378 millones para invertir en temas de seguridad, vinculados a un cierre perimetral y otros servicios, en el espacio del aeropuerto liberiano.

En fin... una de los más sonadas herencias de la Administración Solís Rivera se empieza a quedar sin alas. Estaremos atentos y les mantendremos informados.