Un piloto del Departamento de Defensa de los Estados Unidos confundió las olas de una intensa tormenta en el Oceáno Pacífico con las de un tsunami y generó una falsa alerta de maremoto que fue publicada por la Embajada de Estados Unidos en El Salvador, y replicada por el presidente de esa nación centroamericana, Nayib Bukele.

La falsa alarma fue lanzada a la 12:22 p.m. (hora de Costa Rica) desde la cuenta oficial de la Embajada de Estados Unidos en El Salvador, tanto en español como en inglés, y afirmaba que un avión del Departamento de Defensa había detectado un posible tsunami aproximadamente a 600 millas de la frontera entre El Salvador y Nicaragua.

"Las personas que se encuentren en esa área deben buscar terrenos más altos", decían los tweets.

Rápidamente el aviso se viralizó en la red, al tiempo que creció la incertidumbre y confusión ya que no es usual que sea una embajada la que lance advertencias de tsunami. Ninguna de las instituciones técnicas reconocidas en la materia, incluida el Centro de Alerta de Tsunamis del Pacífico (PTWC por sus siglas en Inglés), emitió alerta alguna sobre ese tsunami.

El presidente salvadoreño Bukele replicó la falsa alerta a las 12:38 p.m., tan solo seis minutos después de emitida. "Toda la población que se encuentra en nuestras costas, por favor movilizarse a tierras más altas. El Departamento de Defensa de los Estados Unidos ha detectado un posible tsunami", escribió.

Dado su tweet, el sistema de protección civil de El Salvador se puso en marcha. Mario Durán, ministro de Gobernación y Desarrollo Territorial anunciaba después que las mediciones del mar no mostraban anormalidades.

Bukele reconoció que la alerta llegó desde un canal no usual, sin embargo, decidió darle la seriedad del caso porque el piloto había visto "el tsunami" y su trayectoria posible era El Salvador.

A las 2:46 p.m. el mandatario "levantó" la alerta y dijo que tanto el Servicio Geológico de los Estados Unidos y el Centro de Alerta de Tsunamis del Pacífico, ambas agencias del gobierno federal estadounidense, habían descartado una amenaza de tsunami.

El Sistema Nacional de Monitoreo de Tsunamis de Costa Rica (Sinamot) indicó horas antes que no había ninguna amenaza de tsunami y que la confusión se originó porque un piloto que había divisado oleaje intenso asociado a una tormenta lo confundió con un tsunami.