El presidente de la República, Carlos Alvarado y la fracción legislativa del Partido Acción Ciudadana (PAC) pidieron al diputado oficialista, Welmer Ramos, que cumpla el compromiso que firmó en campaña electoral y renuncie a su diputación, tras ser denunciado penalmente por la Procuraduría de la Ética Pública (PEP) producto de su participación en el caso del Cementazo.

Alvarado externó tal solicitud durante su atención semanal a los medios de comunicación desde la Casa Presidencial esta tarde, en compañía de la ministra de Comunicación, Nancy Marín.

"Hubo un compromiso expreso para que, de haber una determinación de la Procuraduría de la Ética, el diputado adoptaría una decisión, un compromiso de dejar su cargo", dijo Alvarado.

Mi posición es que don Welmer tiene que honrar ese compromiso adquirido en diciembre de 2017 frente a quien entonces era el candidato y hoy Presidente de la República, pero además públicamente ante la ciudadanía.

Por su parte, la fracción del PAC manifestó en el Plenario de la Asamblea Legislativa a través de la diputada Laura Guido Pérez que secundaban la solicitud del Presidente a Ramos, de que honre el acuerdo alcanzado en diciembre de 2017.

"Esta fracción respalda al Presidente de la República en esta solicitud", dijo Guido. Según la congresista, la circunstancia hoy ocurrida llama una vez más a defender una institucionalidad que es la que revisa las actuaciones de los funcionarios, y dijo que el PAC no tiene la intención de debilitar las posturas de esa institucionalidad.

El criterio de la PEP debe ser tomado con toda seriedad; las instancias a las que la Procuraduría apela deben hacer la investigación con la rigurosidad esperable, y llegar a los extremos que deba considerar para llegar a la verdad, la realidad del asunto, y determinar el trasfondo de las actuaciones que llevaron a don Welmer a tomar las decisiones que llegó a tomar. Vemos consecuencia entre lo que él ha promulgado desde su pensamiento político y lo que hizo desde su labor como ministro de Economía, sin embargo, reconocemos que si hay un planteamiento de esa naturaleza debe haber una investigación rigurosa y don Welmer debe atenderla no desde la curul, sino desde su ejercicio como ciudadano, separándose de ese puesto.

Inicialmente Ramos  se negó a renunciar a su curul y en su lugar, puso a disposición su inmunidad parlamentaria, al afirmar que su carta de diciembre de 2017 indica que renunciaría a la diputación "en caso de que se demuestre" que incurrió una falta, sin embargo, la Procuraduría habló de "posible falta al deber de probidad" y "posibilidad de que haya incurrido en hechos configurativos del delito de tráfico de influencias".