Magistrada Doris Arias recibe el apoyo de los diputados y le gana el pulso a Emilia Navas

—El fin de semana no fue de descanso para Edgar Mora, ministro de Educación. Un tweet suyo el sábado desató tempestades en las redes sociales. A pesar de haber tenido una respuesta rápida a las reacciones que género su comentario (borró el tweet, puso una disculpa en sus redes sociales y dio una entrevista a La Nación) nada bastó para calmar a quienes (desde antes del tweet) piden su cabeza.

— Las reacciones a su mensaje (“Suicidarse es una manera de decir la verdad, posiblemente la más vehemente de todas”) son tan diversas que van desde padres y madres de familia enojados por la ligereza del comentario hasta a quienes encuentran al filósofo francés Albert Camus en los 84 caracteres del texto. Por su parte, los diputados de oposición no perdieron la oportunidad de pedir la renuncia del ministro. ¿Alguien puede darse por sorprendido?

— Ya he abordado este tema antes y ya he dicho lo absurdo que me parece perder el tiempo peleando por atacar o defender el mensaje en particular. ¿Por qué? Porque el mensaje no debió existir, punto. Ninguna necesidad tiene el ministro de educación de contestarle a un influencer un comentario de un tema tan delicado como el suicidio. Ninguna. Lo digo conociendo, respetando y admirando a Mora como el tipo brillante que es y lo digo habiéndolo defendido ya de su primera (e innecesaria) torpeza.

— Esta vez, sin embargo, no hay cómo defenderlo porque ya no se puede hablar de torpeza sino de testarudez. No alcanza el beneficio de la duda para el ministro y no alcanza la paciencia para un Ejecutivo que no hace por dónde resolver algo tan básico como el manual de uso de redes sociales para sus funcionarios. Ya el 20 de mayo, en ocasión a otra #PeladaenRedes de un miembro del gabinete escribimos:

Ese tipo de detalles no se pueden dejar pasar. Se prestan para malintepretaciones y se prestan para (una vez más) ruido innecesario. Carlos Alvarado está empezando. No necesita anticuerpos “gratuitos”. Comunicar es escuchar y escuchar es tener inteligencia emocional. Cada cosa que se dice y que no se dice, importa. El gabinete entero debe entenderlo antes de usar las redes. Y el Gobierno de la República debe tenerlo claro cuando trata con la prensa. Es muy temprano para que pequeños detalles nos distraigan de lo que realmente importa.

— Evidentemente mi insistencia en ofrecer asesorías gratuitas en comunicación y sentido común poco eco tienen en el Ejecutivo que probablemente considera una especie de misión imposible pedirle a su gente que controle la necesidad de poner en redes sociales cuanta cosa se le ocurre sin terminar de entender las consecuencias de tales impulsos. ¿Que si es justo? Ese no es el debate. ¿Que si va contra la liberta de expresión? Ese tampoco es el debate. Hay que tener la capacidad de ver la foto grande cuando se está en la función pública. Punto y aparte.

—  Guste o no, formar parte del Gobierno significa tener una oposición permanente que está día y noche buscando razones para atacar, cuestionar y desacreditar el trabajo que se está haciendo. Si bien tal actitud flaco favor le hace a la democracia, de nada sirve ignorar que es toda una práctica institucionalizada de toooooodos los partidos cuando les toca jugar la carta de la contra...

— A ver, que no es ciencia china: en guerra avisada no muere soldado. En términos futboleros: usted simple y sencillamente no puede dirigir una selección mundialista, enfrentar a Bélgica, comerse cuatro y luego salir a decir que no tiene idea de quién es Eden Hazard. #MandaFuegoPelé

— Evidentemente este episodio no ha de motivar la salida de Mora del ministerio de Educación pero sí que puede marcar un antes y un después para la administración Alvarado en el sentido supra señalado: sentido común y prudencia en el uso de las redes sociales para evitar anticuerpos gratuitos y desgaste innecesario. Los costarricenses queremos juzgar a Mora por su gestión como ministro al frente de de una de las instituciones más importantes del país, no por sus creencias religiosas o sus reflexiones personales en torno al suicidio.

Bonus track:  En plan serio. ¿Tendrá alguna consecuencia lo que dice Claudio Cabezas? ¿Parará en algo la denuncia de Control Ciudadano o estamos ante otro de esos amenos casos de leyes que solo están pintadas?

Hidden track: Más sobre el tuit de Mora y la moción de censura que solicitó el PRN en la sección de Barbas en Remojo.

— La crisis en Nicaragua lejos de resolverse empeora día con día. La cifra oficial de muertos alcanza ya los 146 y el panorama a corto y mediano plazo para la economía y la institucionalidad del hermano país es más que angustiante. Naturalmente la situación en el norte se ha puesto tan espesa que ya empieza a encender serias alarmas en Costa Rica.

— En declaraciones a Columbia la presidenta en ejercicio y canciller Epsy Campbell dijo que nuestro país está preparándose para una eventual oleada de migrantes nicaragüenses. “Estamos preparados para hacer una contención de lo que podría ser un aumento de migrantes. Esperamos que no sea así y por eso abogamos vehementemente por una salida a través de la vía del diálogo en Nicaragua”.

— Campbell también dijo a Nuestra Voz que Costa Rica procurará impulsar una solución multilateral por medio de la Secretaría de Integración Económica Centroamericana pues todo el istmo está viéndose afectado por la crisis que azota a Nicaragua desde el 18 de abril pasado, cuando iniciaron las protestas contra el Gobierno de Daniel Ortega.

— Costa Rica, en todo caso, no solo debe prepararse para la eventual llegada de miles de nicaragüenses a su territorio, también debe empezar a poner en marcha a toda máquina un plan B para poder mover sus exportaciones al resto de Centroamérica pues el 90% de los productos ticos importados por nuestros vecinos inmediatos suben vía terrestre por Nicaragua, donde ya se han construido más de 90 retenes que impiden el libre tránsito.

Dato D+: Se estima que cerca de 6.000 camiones de carga internacional se encuentran atrapados en Nicaragua.

— Es aquí donde me veo obligado a apropiarme de las palabras escritas por la exdiputada Natalia Díaz cuando aludiendo al Ferry Caldera-El Salvador  que primero anunciamos y luego dejamos botado dice: “Instamos a la naviera originalmente interesada en establecer el ferry de esta conexión marítima, a retomar el proyecto de manera expedita, y a las autoridades correspondientes acelerar y facilitar los trámites para la rápida apertura de esta nueva ruta”. ¡Por favor y para ayer!

— El tema en cuestión es serio y no tardará en afectar cada vez con más gravedad al país. Francisco Gamboa, director de la Cámara de Industrias dijo ayer que el sector está perdiendo ya unos 2 mil 600 millones de colones diarios. 

— Así las cosas Costa Rica debe empezar a prepararse para escenarios muy complejos ya que la situación podría seguir complicándose por diversos frentes. Los reportes que nos llegan desde el norte son cada vez más apremiantes, tenemos entonces que prever desde ya la posibilidad de ofrecer ayuda humanitaria a nuestros hermanos nicaragüenses —incluso a gran escala— y tenemos que estar más que dispuestos a confrontar a cualquiera que pretenda explotar la situación con fines políticos para disimular los clásicos —pero afortunadamente cada vez menos frecuentes— discursos de xenofobia populista.