El Presidente de la República, Luis Guillermo Solís impuso un veto por motivos de conveniencia y oportunidad a la reforma de la Ley Orgánica del Colegio de Médicos y Cirujanos de Costa Rica, aprobada por una comisión con potestad legislativa el 21 de marzo anterior.

Se trata del Decreto Legislativo 9530 que vio la luz tras el visto bueno que tuvo el expediente 19.129 y cuyo veto fue solicitado por la Universidad de Costa Rica el pasado 24 de abril, alegando que la modificación pone en peligro la formación, el ejercicio y la calidad de la medicina costarricense.

El veto fue emitido este lunes bajo el oficio DM-FG-1286-18, del cual Delfino.cr tiene copia, y está suscrito por el Mandatario Solís Rivera y la ministra de Salud, Karen Mayorga Quirós.

Una comisión con potestad legislativa plena, también llamada "miniplenario" tiene la potestad de aprobar proyectos de Ley como si se tratara del pleno de la Cámara de Diputados. Existen tres y cada una está conformada por 19 congresistas. 

La reforma aprobada por la Asamblea consiste en eliminar la equiparación de títulos, de modo que cualquier persona, sin importar el país de donde provenga, pueda ejercer en Costa Rica con tan solo presentar el título ante el Colegio.

Además, elimina la obligación actual del Colegio de Médicos y Cirujanos de Costa Rica de oficializar su normativa por medio del Poder Ejecutivo, y con esto suprimir la Rectoría que ejerce el Ministerio de Salud, al dejar a la libre la emisión de normativa por parte de la Junta de Gobierno del Colegio, normativa que, de acuerdo con la Casa Presidencial, afecta la Salud Pública. 

Por otro lado, Zapote justificó el veto en que el artículo 8 del proyecto establece que los médicos extranjeros únicamente recibirán autorización para el ejercicio temporal de la medicina dentro de Costa Rica para fines académicos y de investigación, cerrando la posibilidad de brindar atención médica a la población, por ejemplo, en campañas de salud para disminuir listas de espera en la Seguridad Social y para llegar a lugares con barreras de acceso a los Servicios de Salud.

Existen dos tipos de veto presidencial: por motivos de constitucionalidad; o por motivos de conveniencia y oportunidad. 

"(Esto) limplicaría perder una oportunidad y mecanismo del que hoy se dispone, para impactar positivamente a las poblaciones que presentan las anteriores características", dijeron en su conjunto el Presidente y la Ministra de Salud.

Además, el informe señala que la reforma le estaría dando una potestad "excesiva" al Colegio de
Médicos al volverse éste el ente competente para autorizar la docencia de profesionales farmacéuticos, microbiólogos, odontólogos, enfermeras y nutricionistas, a pesar de que todos estas profesiones poseen un colegio profesional que les regula y fiscaliza.

Este último argumento fue otro de los externados por la Universidad de Costa Rica al Presidente para solicitar el veto del proyecto.

Por último, Solís y Mayorga señalaron que se vieron en la obligación de bloquear la propuesta del Congreso, pues el último texto (el aprobado) no le fue consultado al Ministerio de Salud, de modo que esa institución no tuvo la oportunidad de manifestar sus preocupaciones u observaciones, con lo cual el proyecto podría haber tenido las modificaciones necesarias.

"Esto, (la omisión de consultarle el texto al Ministerio de Salud) evidentemente, no constituye un vicio en el procedimiento seguido, pero si una omisión que pudo haber evitado que ahora el Poder Ejecutivo se vea en la obligación de vetar el decreto legislativo", dice el oficio.

¿Qué sigue ahora?

El oficio con el veto será dirigido a la Asamblea Legislativa, la cual deberá decidir entre dos vías: la primera, aceptar el veto y solicitar a la Comisión correspondiente que haga las modificaciones solicitadas por el Poder Ejecutivo; o la segunda, rechazar el veto y en el Plenario, con no menos de 38 votos, "resellar" el proyecto, haciéndolo Ley de la República sin la firma de Luis Guillermo Solís o bien, de Carlos Alvarado a partir del 8 de mayo.

Lamentos

El Colegio de Médicos y Cirujanos de Costa Rica manifestó públicamente su lamento por la medida de Casa Presidencial, al afirmar que esa iniciativa ayudaría a cumplir "aún mejor" la labor fundamental de la institución de estar al servicio de la Salud y del País.

El Presidente de la Junta de Gobierno del Colegio, el Dr. Andrés Castillo Saborío, indicó que en la próxima sesión de la Junta se analizará el alcance del veto y junto con el Departamento Legal se decidirá el camino a seguir y subsanar los aspectos señalados en la carta presidencial, "respetando siempre el proceso legislativo que deba cumplirse.".