"El que mucho abarca, poco aprieta".

La anterior frase puede resumir lo ocurrido en la sesión del Plenario legislativo de este lunes, que concluyó sin que los diputados destituyeran a Celso Gamboa como magistrado de la Sala Tercera y sin que decidieran sobre el futuro del proyecto de Ley sobre los extrabajadores de Bancrédito.

Las cinco horas y media de trabajo en el seno del Congreso se destinaron a conocer el informe de la Comisión Especial que estudió la solicitud de la Corte Plena de despedir a Celso, aunque la ausencia de más de una docena de diputados, la lectura de la totalidad del informe de la Comisión, los constantes rompimientos de quórum, solicitudes de receso, la defensa que hizo Gamboa, la falta de acuerdo sobre la votación pública o secreta y el evidente esfuerzo de Otto Guevara por obstaculizar el proceso, se trajeron por la borda las esperanzas de quienes esperaban dar por concluido el lunes uno de los capítulos más penosos de la historia de Costa Rica.

La sesión arran...